Por más personal y mejores salarios volvieron a manifestarse el lunes los médicos del Hospital San Antonio de Padua, de Río Cuarto. Tras presentar cartas formales en las que ponen su renuncia a disposición si no mejoran las condiciones, protestaron con aplausos en los pasillos del centro de salud provincial.

El reclamo fue motorizado por profesionales del Servicio de Emergencias para Adultos, pero contó con la adhesión de médicos de diferentes servicios que reclaman “una puesta al día” en puestos laborales y mejoras salariales. Plantearon que el Padua es el único hospital polivalente de referencia para todo el sur de Córdoba, donde viven más de 600 mil personas.

El reclamo escaló y Carlos Negro, subsecretario de Gestión Hospitalaria del Ministerio de Salud, y Pablo Amodei, director de hospitales del interior, brindaron una conferencia el lunes en Río Cuarto. Ahí anunciaron un adicional no remunerativo para todos los médicos que hacen guardias en Capital e interior, cualquiera sea su especialidad (siempre que no cobren ya el adicional por “recurso humano crítico”).

Negro puntualizó que, a partir de noviembre, en los 40 hospitales de Córdoba los médicos que hacen guardia cobrarán una suma adicional no remunerativa que será de 70 mil pesos para quienes trabajan en el interior y de 50 mil para los del Gran Córdoba.

La propuesta fue insuficiente y los médicos rechazaron el monto ofrecido. Piden no ganar menos que la canasta básica y designaciones.

Para intentar destrabar el conflicto, la ministra de Salud de la provincia de Córdoba, Gabriela Barbás, llamó este martes a las 11 de la mañana a los médicos a una reunión en la ciudad de Córdoba.

30 médicos del hospital San Antonio de Padua, que trabajan en el servicio de guardia de emergencias piden ser considerados “recursos humanos crítico”. Además, piden la designación de 13 profesionales más en esa área de salud.

“Se suspendió la presentación de la renuncia. Barbás se ha comunicado y nos ha pedido que vayamos tres personas. Van a ir los médicos, los voy a acompañar”, dijo Cecilia Debandi, la abogada que representa a los médicos de Río Cuarto.