El conflicto gremial que tiene paralizada la planta de Coca Cola en la ciudad de Córdoba podría generar desabastecimiento del producto, según advirtió la Embotelladora del Atlántico SA (Edesa) propietaria del establecimiento.

Además de aclarar que el reclamo del Sindicado Único de Trabajadores de las Aguas y Gaseosas de Córdoba (Sutiaga) y el cuerpo de delegados, “no está sustentado en ningún incumplimiento de la empresa”, advierte que a partir de la pretensión “sin justificación ni sustento jurídico”, está paralizada la actividad productiva de la planta “y, en consecuencia, la comercialización y abastecimiento de los productos de la compañía”.

Según Edasa, a los reclamos de Impuesto a las Ganancias y ajuste salarial, “incorrectamente canalizados a través de la compañía”, se sumó el pedido de un bono extraordinario, el cual –según la empresa– es totalmente infundado.

“La Federación Argentina de Trabajadores de Aguas, Gaseosas y Afines (Fataga), la entidad gremial que los nuclea a nivel nacional y la que negoció las paritarias con las patronales, ha manifestado su preocupación por el conflicto generado únicamente en la planta de la ciudad de Córdoba. Además de destacar que se encuentran en proceso de revisión las paritarias acordadas, que alcanzaron un 40% en el mes de abril y un 132% de incremento interanual”, precisó Edasa a través de un comunicado.

Al igual que lo expresado por Fataga en su comunicado, la empresa embotelladora rechaza la participación de “agrupaciones políticas y representantes sindicales de otras actividades que están interviniendo en estos sucesos con intereses de alcanzar sus fines políticos y no la defensa de los trabajadores”.

Edasa lamenta “las molestias que esta situación ocasiona a proveedores, clientes, consumidores y en especial a “nuestros colaboradores, muchos de los cuales se han visto impedidos de poder ingresar a sus puestos mediante amenazas y agresiones personales”.

Hace dos meses, en marzo, la planta había transitado por un conflicto similar.

Fuente: La Voz del Interior