La noche ya se había despedido. El sol amenazaba con empezar el día, momento en que ellos dejaron los boliches a los que habían ido, treparon a sus motos y comenzaron a buscar la ruta para ir a sus casas de los parajes Luyaba, Chuchira y La Paz, en el Valle de Traslasierra. La tragedia los encontró poco minutos después, en la ruta 14, cerca de la localidad de San Javier.

Aquel sábado 10 de marzo último, tres de los jóvenes de entre 20 y 22 años que iban en esas motos perdieron la vida en el triple choque que sólo involucró a sus rodados.

El comisario Sergio Murúa, de la departamental San Javier, apuntó que “dos de las motos habrían chocado de frente, mientras que una tercera impactó contra ambas”.

Se trató de sólo una parte, formal y directa, de una problemática mucho más profunda. Una explicación de la última escena de una película demasiado densa, que todos los días en las rutas y calles de la provincia de Córdoba repite escenas del dolor de lo irreparable.

Marzo acaba de concluir de la peor manera en lo que respecta a la inseguridad vial: 45 muertos por choques ocurridos en gran parte del mapa provincial.

Lo que significa que el tránsito cordobés durante el mes que ayer terminó se devoró una vida cada poco más de 16 horas.

Choques fatales en marzo de 2018

Una cifra que no es una excepción, ya que continúa la tendencia de los dos primeros meses del año. Este trimestre inicial de 2018 se convirtió en el más trágico desde 2014. Todo un retroceso en materia de seguridad vial en la provincia.

Pero, ¿cuáles son las razones que explican semejante sangría silenciosa en los caminos cordobeses? ¿Quiénes mueren en las calles y rutas? ¿En qué vehículos se movilizan? ¿Cuáles son las ciudades y las carreteras más peligrosas?

Responder estos interrogantes nos lleva a buscar entender una de las principales causas de muerte no natural en la provincia. Y que tienen entre sus principales víctimas, por lo general, a jóvenes que tenían toda la vida por delante.

Desde 2007, La Voz lleva adelante un pormenorizado relevamiento sobre la siniestralidad vial en Córdoba, en el que se analizan más de 20 variables por cada choque con saldo fatal que ocurre en jurisdicción de la provincia.

Hoy, 12 años después, si bien se advierte que en los últimos cuatro años hubo una merma en la cantidad de decesos, otra vez la fiebre estadística se está disparando hacia arriba.

Aquel sábado 10, cuando murieron los tres jóvenes motociclistas, hubo otros cinco choques fatales más, por lo que en total hubo que lamentar 10 muertos en menos de 24 horas.

Números trágicos

La mayoría de estas tragedias ocurrió a la madrugada, el horario más nefasto junto a la noche.

En todo marzo, desde las 20 hasta las 7 de la mañana siguiente, se registraron 22 colisiones de tránsito fatales, lo que representan casi el 60 por ciento del total de choques trágicos del mes.

Mientras que en zona urbanas (calles de ciudades y pueblos) se anotaron 20 impactos fatales (con 21 víctimas mortales), en las rutas se registraron 14 tragedias que se cobraron 18 vidas.

La ciudad de Córdoba, una vez más, se convirtió en el peor conglomerado urbano: nueve choques que dejaron 10 muertos. Una tragedia cada poco más de tres días. En seis de estos casos, las víctimas eran motociclistas, el sector más vulnerable del tránsito en la capital, según una proyección histórica que hasta ahora no se logra revertir.

San Francisco, con tres jóvenes en moto muertos, y Villa María, con dos motociclistas entre los fallecidos, son otras ciudades importantes de la provincia que comenzaron a advertir una creciente problemática en el mismo sentido.

En las rutas, las provinciales 11 (cerca de Laborde y Ucacha), 2 (Villa Nueva y Saira) y 38 (Capilla del Monte y Paso Viejo) fueron la que más choques fatales acumularon durante marzo, dos cada una.

Se trató, en todo caso, de una sangría repartida en distintas direcciones, lo que vuelve a poner de manifiesto que la inseguridad vial continúa desparramada por el mapa provincial.

Un drama cotidiano: En cifras

Distintas variables relevadas durante este marzo.

26 motociclistas murieron como consecuencia de diferentes siniestros viales ocurridos durante los 31 días del mes.

22 de las víctimas fatales no habían superado, aún, los 35 años de vida. Entre ellas había una niña, que iba en moto con su padre.

fueron los peatones que murieron tras ser atropellados. Integran el eslabón más vulnerable de todo el sistema vial.

10 muertos dejaron distintos choques en la ciudad de Córdoba, la peor jurisdicción de toda la provincia. Seis eran motociclistas.

de las tragedias ocurrieron en solitario: despistes, vuelcos y choques contra objetos fijos. Se cobraron nueve vidas.

22 de los 37 choques fatales del mes ocurrieron en horario nocturno, entre la noche y la madrugada del día siguiente.

Fuente: La Voz del Interior