“Leo asómate”. La frase resuena una y otra vez en la cabeza la familia Gallegos. Eso fue lo que le gritaron al disc-jockey de Frontera para que abriera la ventada de su casa, instantes antes del terrible ataque en el que le dispararon dos balazos que le dieron muerte a sangre fría.

“Al tratarse de un DJ, un hombre que trabaja en la noche, muchos pensaban que podía haber alguna situación comprometida, pero al hablar con amigos, conocidos y testigos se dieron cuenta de que mataron una persona honesta, generosa y sin ningún problema con alguien”, cuenta Fernanda Gallegos (50), hermana de Leonardo (48), quien encabeza el pedido de justicia desde el primer momento.

Pasó un año y cuatro meses del crimen, pero la familia no solo atraviesa momentos de dolor ante la pérdida, sino también un verdadero calvario. Primero al no saber por qué tamaño ataque salvaje y luego porque esperan que caiga una persona más a la ya detenida, un cómplice de quien efectuó los disparos según la investigación.

Como si esto fuese poco, en los últimos meses la familia recibe mensajes intimidatorios que debe soportar de parte de personas que –afirman- les usurparon una casa a sus padres en Frontera.

Leo Gallegos junto a su hermana.
Leo Gallegos junto a su hermana.

Asesino, prófugo y peligroso

En la causa, que avanza en la Fiscalía de Frontera a cargo de Nicolás Stegmayer, hay una persona detenida como presunta autora del homicidio. Se trata de Claudio “Tatín” Gudiño (19), quien cayó el 20 de mayo de 2020 y fue imputado como presunto autor de “homicidio agravado por el empleo de arma de fuego y portación de arma de fuego de uso civil”. 

No obstante, resta identificar y aprehender al cómplice Gudiño, quien manejaba la motocicleta con la que arribaron a la vivienda donde se produjo el ataque.

“Todo sigue igual. La causa no avanzó mucho, todavía seguimos esperando que se encuentre a la persona que manejaba la motocicleta”, expresó Gallegos a El Periódico Radio 97.1.

“Desde la fiscalía indican que están trabajando, pero que tenemos que esperar para poder ver resultados, sin embargo queremos que detengan a los responsables. Y principalmente que hablen por qué le hicieron esto a mi hermano”, manifestó. A la vez aclaró que los investigadores por ahora no tienen el móvil. "Podemos suponer que lo mandaron a matar por la forma, pero estamos seguros de que no se equivocaron porque le dijeron ‘Leo asómate’”, dijo.

En cuanto a la persona detenida, refirió: “No habla, no dice nada, sólo repite que es inocente”.

Gudiño, cabe recordar, había sido detenido en un allanamiento realizado en una vivienda de calle Rioja al 2100 de barrio Hipólito Bouchard de San Francisco. En el domicilio secuestraron un arma de fuego tipo revólver calibre 32, prendas de vestir y teléfonos celulares que estarían relacionados con el hecho.

Leo era muy conocido a partir de su trabajo como DJ.
Leo era muy conocido a partir de su trabajo como DJ.

Amenazas y usurpación

La familia Gallegos denuncia desde hace tiempo la usurpación de un domicilio lindante al que vivía Leonardo junto a sus padres en la esquina de Calle 58 y Calle 9, de Frontera. Pero además, remarcan, son frecuentemente hostigados y aseguran que en los últimos seis meses les usurparon otra casa y un garaje que están ubicados en la misma cuadra.

“Fui a la casa de mi mamá y vimos que han usurpado otra casa hace unos seis meses, y hace poco un garaje donde Leo guardaba sus vehículos”, indicó con mucha indignación Fernanda.

“La casa donde vivían mis padres era en la esquina, la casa que usurpan está al lado. Leo pasaba por esa vereda para ir a un garaje a buscar su camioneta, y los saludaba. Yo le decía que no tenés que saludarlo porque están usurpando nuestra casa”, recordó la hermana.

Pero además confesó que ella sufrió amenazas y mensajes intimidatorios, lo que provocó que tenga radicar la denuncia en la Comisaría 6ta de Frontera para advertir la situación.

“Me han dicho algunas cosas por lo que tuve que hacer denuncias, no tengo miedo por mí. Pero tengo mis hijos, mis nietos que me frenan, sino contaría muchas cosas más”, manifestó al referirse a la situación que padecen.

“A la persona que está detenida yo no la conocía, pero mis padres sí. Porque es el novio de la chica de la familia que usurpa la casa de mis padres”, dijo y agregó que pese a ello no había ninguna enemistad con Leo porque su hermano “no tenía problemas con nadie”.

Amigos y familiares realizaron una manifestación para pedir justicia.
Amigos y familiares realizaron una manifestación para pedir justicia.

“Era una persona sana”

Por su trabajo de musicalizador, Leonardo era una persona muy conocida en Frontera y San Francisco. Pero particularmente, lo que destacan tanto sus familiares como amigos es que era “un hombre de bien”.

“No tenía maldad, no decía malas palabras. No tomaba alcohol, no fumaba. Era una persona muy buena. El propio fiscal se sorprendió porque hay muchas personas que fueron a declarar y todos lo hicieron de la misma manera. Hablaron maravillas de él, en nada raro, y cero problemas con la gente”, sostuvo Fernanda.

“Mi mamá obviamente hizo denuncias porque le están usurpando un lugar que era de ella, pero él nunca quiso tener problemas con nadie”, reflejó.

La hermana comentó que la familia atraviesa por un momento de mucho dolor y la vida de todos ellos está destruida: “Hoy veo a mi papá que tiene una tristeza enorme y está cada vez peor, y mi mamá que se hace de una coraza para ser fuerte y que mi papá no la vea. Y nuestra vida está destruida, mi hermano no merecía esto”.

23 de abril de 2020

Eran las 19.30 del 23 de abril de 2020 cuando una motocicleta frenó al frente de la vivienda del DJ. Estaba tomando mates con sus padres, le golpearon la ventana y lo llamaron a él. “Leo asomate”, le dijo una voz de una persona que creen conocida.

“Fue allí cuando Leo abrió la ventana, y ahí nomás le tiraron y se fueron. No le robaron nada", contó Fernanda.

Por su parte, en una de las audiencias, el fiscal Stegmayer describió que "la persona aún no individualizada conducía el vehículo y el imputado (por Claudio Gudiño), que iba como acompañante, llevaba consigo un revólver calibre 32 largo, sin la debida autorización y en condiciones de uso inmediato".

"Una vez en el lugar, Gudiño descendió del vehículo, caminó hasta una ventana que da al comedor de la vivienda, la golpeó y llamó a Leonardo Manuel Gallegos por su nombre", precisó.

"Seguidamente, la víctima abrió la ventana y el imputado le disparó dos veces. Uno de los disparos impactó en la cara y otro en el pecho de la víctima", relató.