La investigación por un siniestro vial en el que dos motociclistas fueron embestidos por un auto cuyo conductor escapó, el pasado 29 de julio, tuvo un giro por demás rotundo.

Todo sucedió el pasado 30 de junio, alrededor de las 23, en la avenida Vélez Sársfield al 6600, a la altura del barrio Alejandro Carbó, de la ciudad de Córdoba, donde un auto Chevrolet Meriva chocó contra una moto conducida por un joven de 22 años, quien iba acompañado por su hermana de 16.

El automovilista iba por esa avenida y dio un giro en ‘U’, chocó a mis hijos y, lejos de detenerse a prestar ayuda, se mandó a mudar”, expresó Juan Carlos Chacoma, el padre de las víctimas, desde el Hospital de Urgencias.

Tras el impacto, el conductor de la Meriva escapó. Pero en el lugar, quedó la patente del rodado, por lo que fue simple localizarlo.

Fue entonces que la familia contó que todo había sido una "travesura" adolescente. El padre aseguró que su hijo de 15 años se había llevado el coche sin permiso y que se marchó del sitio del siniestro porque se había “asustado”

Pero el fiscal Pedro Caballero y los investigadores dudaron, y continuaron trabajando en silencio. Hasta que en las últimas horas corroboraron que todo habría sido una mentira del padre, ya que ahora se sostiene que era este hombre el que manejaba la Meriva al momento del choque.

El conductor, identificado como Jonny Mercado, fue acusado del delito de "lesiones culposas graves doblemente calificadas" por el uso de un vehículo y por haber huido tras chocar a los dos motociclistas. Continuará en libertad.

Mientras tanto, los dos jóvenes se recuperaron en el Hospital de Urgencias, aunque aún tienen secuelas importantes.