En medio de la tragedia del pasado domingo en la ruta nacional 158, merece destacarse la tarea imprescindible de las dotaciones de Bomberos Voluntarios de San Francisco que intervinieron para rescatar al único sobreviviente del interior de la cabina destrozada del camión.

No es ninguna novedad la entrega y el incuestionable compromiso de estos servidores públicos, pero hay que subrayar además la gran capacitación que cuentan para desarrollar las tareas que les son encomendadas. No es sólo llegar rápido, sino también saber qué hacer. Por eso no cualquier cuartel del país puede hacer lo que hicieron los bomberos locales.

La capacitación constante de todo su personal es algo en lo que las autoridades del cuartel, hoy con Hobey Salvático a la cabeza, ponen un especial interés. Porque saben que en situaciones de emergencias todo eso resultará en un mejor servicio a la comunidad.

Pero además, el muy difícil rescate del sobreviviente luego de casi tres horas de trabajo también fue posible gracias a la inversión que hace la entidad en la compra de herramientas que le permitan llevar adelante la tarea. La confianza de los vecinos en la institución se devuelve de esta manera.

En una larga historia de promesas incumplidas y desidia de las autoridades responsables de que la ruta se encuentre en condiciones, los bomberos sanfrancisqueños otra vez pusieron la cara para salvar una vida y respondieron con un gran profesionalismo.