Alemania impondrá restricciones a escala nacional a los no vacunados e implantará la vacunación obligatoria previsiblemente a partir del próximo febrero, anunció la canciller saliente Angela Merkel, tras su reunión con su previsible sucesor, Olaf Scholz, y los líderes regionales.

Entre las medidas adoptadas se incluye el cierre del ocio nocturno a partir de ciertos niveles de incidencia de contagios, así como restricciones a eventos públicos y contactos, especialmente entre los ciudadanos no vacunados, que sólo podrán de manera limitada con personas fuera de su núcleo familiar. 

Así, en las actividades de ocio se aplicará la regla de las 2G -por geimpft o genesen (vacunado o sanado)- independientemente de las cifras de contagios y se podrá pedir, adicionalmente, un test negativo. 

También en el comercio minorista regirá la regla de las 2 G, a excepción de los establecimientos de productos de primera necesidad.

Cifras altísimas

El Gobierno alemán informó hoy que el país superó los seis millones de casos de coronavirus tras sumar casi 75.000 contagios en las últimas 24 horas, un nuevo repunte que se produce un día después del anuncio de mayores restricciones para intentar frenar la cuarta ola.

Según datos del Instituto Robert Koch, el ente gubernamental encargado del control de enfermedades infecciosas, la cifra total de contagios alcanzó los 6.051.560 y los fallecidos llegaron a 102.568.

En las últimas 24 horas fueron registrados 74.352 positivos y 390 muertos.

En cuanto a la tasa de incidencia, llegó a los 442,1 casos por cada 100.000 habitantes durante la última semana, con un total de 367.597 casos durante los últimos siete días, según informó la agencia de noticias Europa Press.

Aquellos que no hayan sido inoculados estarán prácticamente confinados al tener vetado el acceso a comercios no esenciales, restaurantes, lugares de culto y de ocio.

Este sector de la población tampoco podrá reunirse con personas fuera de su núcleo familiar.

Además, las autoridades acordaron que sea obligatorio que los niños usen tapabocas en todas las escuelas, algo que no estaba vigente hasta ahora en todo el país.

Pese a las restricciones a nivel federal anunciadas por Merkel, algunos estados ya anunciaron que endurecerán más las medidas.

En el caso del estado de Baden-Wuerttemberg, en el suroeste del país, se deberá presentar en los restaurantes un hisopado negativo, aunque los clientes estén vacunados o se hayan recuperado de la enfermedad.

Esta medida entrará en vigor el sábado, cuando también se limitará el aforo en grandes concentraciones, como en los partidos de fútbol, a los que solo podrán asistir 750 personas. También Baja Sajonia, en el noroeste alemán, instauró el sistema de "vacuna más prueba" para casi todos los ámbitos de la vida pública, así como limitaciones más restrictivas de aforo.

En el caso de Renania del Norte-Westfalia, el estado más poblado de Alemania, las autoridades indicaron que se adherirán a las normas nacionales que entrarán en vigor este sábado.