El edificio fue abandonado por la última familia en agosto de 2012 y desde esa época comenzó a pensarse que se haría con este inmueble que le pertenece a la Provincia. Un relevamiento realizado por un arquitecto enviado por el gobierno cordobés dio como resultado que el edificio se encontraba en “ruinas, con redes eléctricas y sanitarias precarias”, lo que significaba un verdadero peligro para las familias que allí vivían. Y cuando la última se fue, empezó a asomar la idea del Centro Cultural, el cual hoy va tomando forma.

Inversión

Para levantar este espacio se van a terminar destinando alrededor de 14.500.000 pesos, que fueron aportados por el gobierno provincial. El edificio que se está construyendo  tiene 3.000 metros cuadrados cubiertos y según sostienen la obra marcha a buen ritmo. Estaría lista a fines de año.

Respetar la fachada

El edificio, donde alguna vez se impartió justicia, pero que luego varias familias sufrieron en carne propia algunas de las injusticias de la vida, conservará su antigua fachada, de estilo italianizante, y servirá de “cierre virtual” para un espacio público y explanada, que estará destinado a exposiciones y actividades al aire libre.

Por otra parte, el Centro Cultural contará con un hall de ingreso y recepción, cafetería, tienda, librería, una mediateca, aulas taller, además de un espacio específicamente destinado para el montaje de exposiciones.

Pablo Canedo, titular de la Agencia Córdoba Cultura, confirmó en una de sus visitas a San Francisco durante este año que el nuevo espacio tendrá tres volúmenes diferenciados, formal y funcionalmente, y formará un corredor cultural unido a la plaza Vélez Sarsfield”.