“Te va a pasar lo mismo que la maestra jardinera”, cuenta Clara (nombre ficticio para no revelar la identidad de la mujer) mientras denuncia a su pareja por haberla golpeado. Ella es víctima de violencia verbal, pero asegura que en el último tiempo el hombre comenzó a golpearla y amenazarla.

Este tipo de amenaza es hoy un indicador común cuentan desde las áreas que receptan este tipo de denuncias y las que trabajan en su contención: nombrar el caso de María Eugenia Lanzetti para infundir aún más terror. Pero tanto este trágico caso, de trascendencia nacional, como las marchas en todo el territorio del país exigiendo “Ni una menos”no tardaron en generar conciencia y valentía en aquellas mujeres que son violentadas y que hasta no hace mucho tiempo no se animaban a contarlo.

Desde la Jefatura Policial de la Departamental San Justo, el comisario Adrián Pochettino confirmó a El Periódico que actualmente existen 26 botones antipánicos activos, 18 más que cuando “Marita” fue asesinada el pasado 16 de abril, apenas casi tres meses después del hecho. Todo un indicador.

Más víctimas

La Unidad de Asistencia Integral en Violencia Familiar, que funciona en la Asistencia Pública (calle Colón 163), incrementó en un 50 por ciento la demanda desde la muerte de “Marita”. A esta área llegan casos derivados tanto de tribunales como del Hospital Iturraspe. Además las víctimas y sus familiares pueden pedir allí asesoramiento, ya que el centro cuenta con profesionales especializados que brindan ayuda psicológica, psiquiátrica y legal.

Rodrigo Beccaria, quien está a cargo de la dependencia, explicó a El Periódico que “la demanda aumentó en los últimos meses un 50 por ciento, las víctimas y sus familiares están más alertas a estas situaciones. Tuvieron mucho que ver las instituciones en la derivación de los casos, hay más apertura”. Luego opinó que tanto el caso de Lanzetti como las marchas nacionales del #Niunamenos “se metieron en las charlas y discusiones de la vida cotidiana”.

Esta unidad, que asesora y les brinda contención a las víctimas de violencia, en los próximos días contará con una psicóloga que si bien no ofrecerá tratamiento, trabajará interdisciplinariamente.

Beccaria reconoció que “las víctimas sentían mucho temor por el miedo a la muerte porque eso fue lo que se visibilizó. ´Quiero un botón porque tengo miedo a que me mate´, decían. Se empezaron a pedir respuestas inmediatas”, agregó.

..........................................................................................................................................................................................................................................................

DÓNDE DENUNCIAR

-0800-888-9898 es la línea gratuita de asesoramiento y denuncia de alcance provincial.

-Unidad de Asistencia Integral en Violencia Familiar (Asistencia Pública). Tel: 439120/123. Lunes, martes, miércoles y viernes de 8 a 14, y jueves de 13 a 18.

-Secretaría de Violencia Familiar. 2do piso de tribunales. (03564) 475000 (Int. 4). De lunes a viernes de 8 a 13.30.

Unidad Regional 6 de Policía. Tel: 101.