El incremento de pacientes en el Hospital José Bernardo Iturraspe de San Francisco no es una realidad nueva sino que se viene detectando desde 2017. Y según datos aportados por el director del nosocomio, Valentín Vicente, en aquel año se atendieron 70.000 pacientes mientras que en 2018 la cifra se elevó a 120.000, representando un incremento de cerca del 75 % de prestaciones brindadas.

“Tenemos un aumento significativo en los últimos años y sobre todo en los últimos meses, de los cuales todavía no tenemos las estadísticas pero en líneas generales vemos que hay más gente que se corre al sector público por falta de cobertura de salud, en este sentido el aumento fue enorme en la demanda”, admitió Vicente.

Este panorama de San Francisco también tiene su correlato a nivel provincial, donde la demanda hospitalaria creció un 25 por ciento en virtud de la crisis, según manifestó el ministro de Salud, Francisco Fortuna. En el Hospital Iturraspe, Guardia Central y Pediatría fueron los servicios que más atenciones requirieron.

Mutualizados

Vicente también reveló un incremento en las atenciones a pacientes mutualizados: “En 2017 las consultas fueron de 9000 y en 2018 ascendieron a 14.000, lo que nos representó un aumento del 60 por ciento en la demanda”, sostuvo.

Pero además, el director del nosocomio consideró que la cifra podría ser superior si no fuera porque el centro de salud se encuentra en obras. “Esto a pesar de que estamos con la remodelación total del Hospital, lo que también genera una disminución en la capacidad de atención, porque al estar en obra la cantidad de turnos para consultorios en algunas especialidades han tenido una merma. Si no, creo que la demanda podría ser muy superior”, reflejó.

Si bien Vicente manifestó no desconocer la crisis económica que atraviesa el país, también supuso que la gente que elige al hospital lo hace porque se han vuelto más competitivos los ofrecimientos en los servicios de salud. “Esto es por la gran inversión que está haciendo la Provincia en equipamiento y en servicios”, comentó. “Tampoco desconocemos la crisis económica que existe, muchas veces para no pagar un coseguro o el plus mucha gente mutualizada prefiere atenderse en el Hospital”.

Por servicios

Según el profesional los servicios que más requeridos en estos últimos meses fueron Pediatría, Guardia Central y Neonatología.

“En la remodelación de los consultorios tuvimos un problema en la oferta de turnos, pero cuando notamos que la cantidad de solicitudes de atenciones obliga a dar turnos con mucho tiempo de espera, tratamos de ofrecer entre turnos o reforzar ese servicio. Por el momento no hemos tenido problemas de no poder satisfacer la demanda”, apuntó el funcionario.

Por la crisis la demanda de atención se duplicó en el Hospital Iturraspe

Reinauguración

Por último, Vicente contó que en algunas semanas se podrá reinaugurar parte de obras realizadas en el Hospital durante el último año y los sectores que volverían a la normalidad serían los consultorios externos, el internado de todas las especialidades, el servicio de oncología, de rayos y  el nuevo depósito de farmacia.

“Efecto cascada”

Jorge Chiavassa, gerente de CAMI Salud, también se refirió a la situación que atraviesa el sector de la salud debido a la crisis económica reinante. Si bien reconoció que cada mes la firma suma afiliados, otros deciden bajar a planes de cobertura básica. 

“Nosotros en CAMI Salud todos los meses estamos aumentando afiliados, pero hay un efecto cascada por la situación económica que hace que muchos afiliados decidan pasar de planes integrales a algunos más básicos”, relató.

Para evitar la baja de afiliados en CAMI trabajan para generar planes más económicos. “Esto permite que hasta que mejore la situación, vuelvan las horas extras a la industria, el cliente no se vaya y continúe con una cobertura de salud. Es permanente la generación de planes que estén a la altura de cada persona, es por eso que no tenemos pérdida de cartera sino que crece por la producción propia de clientes”, insistió Chiavassa. 

Por la crisis la demanda de atención se duplicó en el Hospital Iturraspe
Jorge Chiavassa, gerente de CAMI. 

“La preocupación es general en el sector de la salud, porque por más que achiques los planes hay gente que no llega y se queda sin cobertura. Mientras que otros vuelven a la obra social sindical”, reveló en calidad de presidente de la Cámara de Entidades de Medicina Prepaga (CEMPRA).

Regreso a la obra social sindical

Otro de los efectos de la crisis económica es el regreso de los afiliados a las obras sociales sindicales de origen, situación que reflejó Gabriela Sidler, secretaria general de la Asociación de Trabajadores de la Sanidad (ATSA).

“Mucha gente que se había dejado la obra social sindical está volviendo a solicitarla, por las diferencias en los costos en relación a una prepaga. Por supuesto que este traspaso es por una cuestión económica y también a causa de que se ha mejorado la calidad de prestaciones que ofrece ATSA en esta nueva gestión”, expresó Sidler.

La situación en la provincia

Según datos del Ministerio de Salud provincial, el porcentaje de cordobeses sin obra social pasó del 42 al 47 por ciento en un año. Los datos, que se desprenden del Sistema Integrado de Información Sanitaria Argentino (Sisa), indican que en enero del 2018 había 1.440.069 personas sin cobertura. Pero en diciembre de ese mismo año, la cifra trepó a 1.607.331. Esto es: 167.262 cordobeses más.