Un grupo de padres de niños y adolescentes con discapacidad reiteró el reclamo por la reapertura del Centro de Diagnóstico, Estimulación e Integración (CDEI) Fundación Akhenatón.

"Vamos a hacer una convocatoria por la apertura de CDEI que está cerrado desde que empezó la pandemia. A este centro van aproximadamente 100 chicos, entre niños y adolescentes, que tienen distintos problemas de discapacidad. Se está tornando bastante complicado", explicó Paola Actis, madre de dos niños que requieren de terapias de manera periódica. Para esto, organizaron una concentración este sábado a las 18 en la Plaza Cívica.

Actis destacó que, si bien está cerrado el centro, los profesionales están haciendo un "trabajo inmenso". "Ellos tienen sus terapias por videollamada, cosa que no es lo mismo para nada, incluso hay muchos casos en los cuales no disponen de internet en su casa. Hay casos en los que tienen únicamente teléfonos que van a crédito y más de una vez se han tenido que suspender las terapias por eso; aparte yo entiendo que el tema de la pandemia y del virus es una cosa muy complicada a nivel país, opino que la parte psicológica también es salud y el COE a eso lo está haciendo a un lado”, analizó.

Actualmente son alrededor de 100 chicos que se quedaron sin sus terapias: “Muchos están depresivos, en sus camas, no tienen ganas, lloran; es tremendo. En mi caso mis hijos tienen un trastorno que se llama TDAH, eso no tiene cura pero sí tiene tratamiento para una mejor calidad de vida, pero desde que está cerrado ellos no pueden asistir, imaginate cómo los tengo", contó.

Sobre la concentración, explicó que lo harán en la fuente de la plaza Cívica. "La idea es caminar unas cuadras si nos permiten porque tampoco queremos hacer algo fuera de lugar. Vamos a pedir pacíficamente, como corresponde, con las medidas correspondientes, con distancia social y barbijos, pero necesitamos con urgencia como papás ser las voces de más de 100 chicos porque ellos lo necesitan urgente", dijo.

"Pedimos la habilitación para que se pueda abrir el centro, si bien desde la institución se presentó todo el protocolo correspondiente y ya tenía el ok, de un día para el otro le dijeron que no pueden abrir”, agregó la mujer. 

"Los respeto en toda la lucha"

Analía Dussin, al frente de CDEI, manifestó que la idea surgió de los papás y que el centro integrador acompañará: "Esto nace de toda una movilización de los papás porque nosotros seguimos trabajando, desde el momento en que se tuvo que cerrar, de manera virtual. Y ya ahora, a pesar de todo el trabajo titánico, hay criaturas que ya se resisten, que están retrocediendo, que están decayendo. Hay muchos papás que vuelven a la normalidad y es más difícil que los chicos puedan persistir en las tareas, se complica la situación familiar, realmente la situación se está haciendo insostenible".

"Yo los respeto en toda la lucha que ellos quieran hacer porque me plantean algo coherente, que pueden ir a un bar o a un gimnasio pero que no pueden llevar a sus hijos a rehabilitación, entonces tienen todos los derechos para luchas por sus derechos. Desde el Centro hicimos todo lo que pudimos hasta ahora", expresó.

En ese sentido, Dussin indicó que desde el centro integrador presentaron un protocolo, que cumplía con todas las medidas de prevención del coronavirus, pero que fue rechazado. Así, detalló en qué consistía: "Se iba a volver progresivamente, no iban a volver todos juntos, se iba a dar prioridad a los casos que más lo necesitaban, incluso como es un centro de integración se hace apoyo escolar, entonces si antes iban cinco días, que ahora a lo mejor fueran un día y después siguieran online. En ningún consultorio o aula iba a haber más de un profesor y un paciente, tenemos dos puertas, una de ingreso y una de salida, los chicos ni se cruzarían. No permanecería nadie en la sala de espera porque les pedimos a los papás que fueran puntuales a la hora de llevarlos y retirarlos".

“Los chicos necesitan actividad presencial. Hay papás que no tienen internet, que no pueden conectarse, o que no tienen la escolaridad como para estar ayudando a los chicos en sus casas con las tareas escolares. Tampoco están preparados, ni son docentes y mucho menos docentes especializados, porque son niños que tienen dificultades en lo escolar. Estamos viendo cómo los papás han colapsado y vemos cómo los chicos han decaído", finalizó Dussin.