El 63% de los profesionales de la salud matriculados en Córdoba actualmente reside en la Capital provincial, donde habita el 38% de la población. El resto, se distribuye en el interior. Sumado a la falta de profesionales en algunas especialidades, estas cifras reflejan un problema para el sistema sanitario del interior provincial que podría agravarse con el correr de los años.

El dato surge de un estudio del Consejo de Médicos de Córdoba, que alertó hace unos días sobre la falta de médicos en el interior provincial, algo que no parece solucionarse a pesar de las políticas implementadas en los últimos años para promover la radicación de profesionales en pequeñas localidades.

Claro que no todo el interior lo sufre de la misma manera porque entre los distintos departamentos hay disparidad, según las cifras del mismo informe.

En el norte provincial, Pocho, San Alberto, Sobremonte y Río Seco tienen menos de un médico cada mil habitantes; Minas, Cruz del Eje, Tulumba y Río Primero no llegan a dos; en el sur, Juárez Celman y General Roca están en situaciones similares.

Departamentos como Río Cuarto, General San Martín y Colón están bastante mejor, ya que tienen casi cuatro médicos cada mil habitantes. En San Justo, el promedio es tres profesionales en base a esa población.

Como contraste, en la ciudad de Córdoba hay 7,7 médicos por mil habitantes. Cabe indicar que la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda tener al menos cuatro profesionales cada mil.

Escenario en San Francisco

El director médico de la Clínica Regional del Este, también vicepresidente de la Asociación de Clínicas de la Provincia de Córdoba, Daniel Puricelli, explicó que al salir de la pandemia afrontan la escasez de profesionales y aclaró que eso se debe a un combo de causas: “La principal es que cada vez se estudia menos Medicina. La cantidad de médicos que se recibían en la época donde me gradué eran alrededor de 1300, hoy son 380 a nivel provincial, tanto en la UNC como la Católica. La camada nuestra se empieza a retirar y hay que reemplazarla y eso está crujiendo ya en algunas áreas porque faltan especialidades y profesionales”, consideró.

También consideró que existe un fenómeno del que poco se habla que fue la caída de las clínicas de los pueblos pequeños: “Hace una década había 256 clínicas en todo Córdoba, hoy son 90 y pico. Clínicas que abastecían la demanda de atención primaria de su localidad. Hoy esa gente se viene a atender a San Francisco”.

En la salud pública, el director del Hospital Iturraspe, Valentín Vicente, sostuvo que en el nosocomio la mayoría de los cargos médicos “afortunadamente están cubiertos”, aunque aclaró que es una realidad la falta de profesionales en especialidades críticas como pediatría, neonatología, neurocirugía, cirugía infantil y terapia intensiva: “Se trata de especialidades pediátricas y neonatales, pero este problema no solo lo tiene San Francisco sino que existe en la provincia y en el país”, explicó a El Periódico, y agregó: “Hay una disminución en la elección de la carrera Medicina en general y dentro de los aspirantes o los médicos egresados ya con el título de grado estas especialidades no se eligen”.

Este punto de vista coincide con el de las cámaras y entidades médicas que entienden que muchos profesionales se inclinaron por especialidades más redituables y con menor carga de trabajo.

Vicente recalcó que esta situación repercute a todo nivel, aunque manifestó que es más compleja en las guardias: “Es un problema que se está empezando a presentar y se incrementará con el correr de los años. Formar un profesional con una especialidad tiene una media de entre 10 y 12 años de carrera, entonces si esto sigue igual será más complicado en los próximos años”.

Pediatría, una especialidad que escasea

Por otra parte, en la última semana el Consejo Médico de la Provincia de Córdoba advirtió sobre la falta de pediatras en el interior cordobés. Su titular, Héctor Oviedo, explicó que el estudio que encargó la entidad arrojó fuertes diferencias entre la capital y el resto de las localidades.

En la misma sintonía, la Sociedad Argentina de Pediatría (SAP) realizó igual advertencia. A través de un comunicado, sostuvo que quedan vacantes muchos de los cupos que todos los años se abren para cubrir residencias en pediatría, neonatología y terapia intensiva.

La asociación pintó también un panorama complicado hacia el futuro: “La no formación de especialistas, al igual que de médicos clínicos, ocasionará una grave crisis de salud pública en los próximos años”, sostuvo.

Al ser consultado Vicente sobre esta situación puertas adentro del Iturraspe, respondió: “Hay más de 15 profesionales en el servicio de pediatría, tres médicos de guardia activa por día en las áreas de neo, internado y guardia. Estamos cubiertos para la demanda, pero no se puede negar la realidad que atraviesa este sector”.

¿Por qué escasean los pediatras? Pablo Amodei, director de hospitales del interior del Ministerio de Salud de Córdoba, dijo en declaraciones a La Voz del Interior que las nuevas generaciones de médicos tienen otra perspectiva y otra visión de la medicina: “Cuando los entrevistamos, nos comentan que en general tratan de evitar las guardias y optan por especialidades con menor demanda”.

Según datos del Ministerio de Salud, este año se cubrió el 84% de los cupos para residencias en pediatría en la provincia. En los últimos cinco años se abrieron 165 puestos en la especialidad. De ellos, ingresaron 133 y 32 quedaron vacantes.

En busca de soluciones

El Ministerio de Salud de Córdoba conformó una comisión para la formación de recursos humanos en salud, acción que se suma al plan de radicación de médicos en el interior provincial. La conforman las cuatro facultades universitarias de Medicina y las distintas asociaciones que nuclean a los profesionales.

En el caso de pediatría, Amodei informó que se incentiva a los profesionales con los adicionales por guardia, una diferencia en la remuneración. Agregó que se arman equipos de al menos dos médicos para evitar la sobrecarga laboral y que se intenta coordinar con el sector privado.

El funcionario agregó que los servicios de pediatría y neonatología fueron reforzados para atender la demanda de infecciones respiratorias de invierno. Otra de las estrategias es descomprimir las guardias con pacientes que pueden ser atendidos en los consultorios externos.