El último fin de semana se disputó una nueva fecha de la Liga Juvenil y en una de las canchas, Antártida Argentina, ocurrió un hecho no relacionado a la competencia que puso a todos en alerta: Valentín, un joven jugador de 15 años –representa a Iturraspe- empezó a convulsionar dentro del campo de juego.

Enseguida, la paramédica que estaba en ese momento, Mariana Cisterna, fue la encargada de socorrerlo. Todavía con la adrenalina que vivió en esos minutos, al día siguiente habló con El Periódico Radio y lo contó de la siguiente manera: “Valentín estaba jugando, corría bien y de repente paró el juego y se desvaneció lentamente cayendo al suelo. Me di cuenta que algo raro pasaba, entonces agarré mi bolso e ingresé a la cancha”, relató.

La primera escena fue verlo al joven temblando mucho: “Entramos con el profe, me acerco y le sostengo su cabeza desde la nunca a Valentín para que no se golpee. Temblaba mucho, respiraba muy fuerte. Sus signos vitales no estaban bien y empezó a convulsionar”, agregó.

Cisterna manifestó sentirse tranquila en ese momento y agradeció a quienes colaboraron con ella mientras hacía su trabajo. Aunque el accionar fue por unos minutos, para ella significó una eternidad: “Duró un minuto y medio todo, cuando vuelve en sí le hablaba y hacía preguntas y él me respondía apretando mi mano”.

Cómo funciona la cabeza en ese momento

Mariana reconoció que durante ese momento se le cruzaron muchas cosas: “Tengo un hijo de su edad. Pensé en la mamá y sentí que debía cuidarlo. Él puso su cabeza en mi hombro y le dije ‘vamos Vale, ayúdame’. Así se fue normalizando hasta que llegó una ambulancia”, recordó.

Tras ello, Valentín fue hospitalizado, le realizaron chequeos y el mismo domingo por la tarde le dieron el alta médica.

Quién es Mariana

Mariana Cisterna es paramédica de la ciudad y estudiante de Enfermería.

Trabaja en varia ligas de fútbol como la Juvenil, Rafaelina, Regional y Baby Fútbol, entre otras.

Mariana Cisterna.
Mariana Cisterna.

Aunque explicó que no es la primera vez que debe intervenir en situaciones de cancha, aseguró que esta fue la más movilizante: “Fue una mezcla de sentimientos haber hecho este trabajo. Hay que mantener la calma. La gente está detrás preocupada, grita pero uno debe mantenerse calmo y proteger al paciente. Cuando la persona se normaliza y está en sí darle tranquilidad”.

Mariana contó que el lunes por la noche pasó a visitarlo por su casa y lo encontró bien. También remarcó la importancia de conocer sobre priemros auxilios para actuar rápido antes distintos episodios.