Los artistas serán los últimos en volver a los escenarios. Es lo que se dice y es lo que ellos saben. Por eso surge la necesidad de reinventarse en este tiempo de crisis por el coronavirus. Aunque para los locales Luciana Balangione (40) y Gonzalo Borgogno (35), que conforman el dúo La Parlota Circo, se trata en su caso de readaptarse. En los próximos días pondrán en marcha un nuevo emprendimiento dejando los escenarios de lado momentáneamente para subirse a una camioneta y sumarse al rubro del transporte, con fletes y la posibilidad de hacer trámites a distancia. 

Para adquirir la herramienta de trabajo, su nuevo vehículo, apelaron a todo lo que tenían a su alcance: la venta de su casilla rodante, su carro, ahorros y dos cobros del Ingreso Familiar de Emergencia (IFE).

“Para nosotros no hay una cuestión de reinvención, eso es otro proceso. Pero sí estamos en una etapa de readaptación. Vivimos así, viajamos bastante y nuestro trabajo que podemos hacer acá cambia cuando vamos a otra plaza o tenemos otro público. Ese ejercicio los artistas callejeros lo tenemos aceitado, cada plaza y público es distinto. Por eso no fue difícil adaptarnos a esto, no fue un choque muy grande, sí nos llamó la atención esto de quedarse adentro”, dijo Borgogno a El Periódico en relación a la cuarentena.

Para Gonzalo no poder trabajar fue “súper raro”, pero lo que consideró más terrible fue “no poder llevar plata a casa”. “Nosotros en el galpón donde trabajamos tenemos el taller con madera, hierro y uno mantuvo la cabeza ocupada, no para evadir sino para tener un ejercicio de poder crear, reciclar y remodelar el lugar. Pero lo más raro es lo económico, una evidencia de cómo vivimos, de cómo esta vista la cultura y su rol y los espectáculos para los gobiernos, ya que vemos una suerte de abandono y en esta situación salió a flote”, reflexionó el artista.

En la misma sintonía se manifestó Balangione, quien además es profesora de Canto: “Los trabajadores de la cultura están en situación precarizada y hay que reflexionar sobre eso. El arte significó mucho en estos momentos de encierro. No éramos esenciales pero a la gente encerrada la música, el baile y el ejercicio le sirvió para salir de los nervios, la depresión”.

Imposibilitados de actuar, La Parlota deja el circo por un rato para dedicarse al flete

Si bien recientemente pudo volver a brindar sus clases, Luciana aseguró que se vio resentida la actividad previo a las flexibilizaciones: “Muchos alumnos no optaron por la modalidad virtual por no contar con tecnología suficiente o no sentirse cómodo”, aunque le vio el lado positivo: “Con más tiempo libre me pasaron dos cosas: compartir más tiempo con la familia, mi esposo y mi hija, reencontrarnos sin andar corriendo tanto y cocinar juntos, entre otras cosas. También me enfoqué con lo de virtualidad, se abrieron muchas posibilidades de formación y tomé cursos para perfeccionarme”, indicó.

El nuevo emprendimiento

El nuevo emprendimiento –contó Gonzalo- nació por accidente porque la camioneta que hoy utilizará para hacer fletes y demás, se iba a utilizar para viajar a hacer espectáculos a otras plazas, entre ellas Chile.

“En el verano hice una pequeña gira en Chile que gustó mucho. Y luego recibí la propuesta para ir en abril, mayo y junio. Cuando volví de Chile empezó la búsqueda de un vehículo que pudiese suplantar la casilla del auto para viajar una sola persona y que pueda pernoctar”, inició el relato.

Para contactarlos hay que llamar a los teléfonos (03564) 15474056 / 423110.

En esa búsqueda apareció una Renault de color blanco, modelo 1991, en San Francisco. Cuando se decidieron a comprarla se les vino encima el decreto de aislamiento social, preventivo y obligatorio: “Aparece lo del coronavirus y cambió los planes”, recordó Borgogno, y añadió: “Ahí la compra quedó en stand by, pero cuando vimos que esto iba a para largo la reactivamos y decidimos usarla como flete pero en el futuro retomar la idea original”, aseguró.

Para la pareja es empezar de cero en un nuevo rubro: “Tenemos la posibilidad que la calle nos da un plus cuando emprendemos y tenemos una forma distinta de encarar los proyectos. Hace una semana tenemos la tenencia del vehículo para ya empezar a laburar”, dijeron motivados.