Muchas instituciones de San Francisco no logran sumar nuevos asociados. Y como viene la mano, mantener los que están se volvió un desafío. También es un reto apelar a la venta de rifas o comida para recaudar fondos.

La Sociedad de Bomberos Voluntarios, con unos siete mil asociados, hace malabares en la actualidad para poder mantener el grueso de socios: “Desde enero a esta parte hemos perdido un 5 por ciento de asociados”, explicó a El Periódico su presidente, Ricardo Giletta.

“Bomberos es una asociación civil sin fines de lucro, donde hay un tema social. El valor de la cuota siempre ha sido muy bajo, la subimos en abril después de un año y medio pasando la básica de 25 a 35 pesos. Nos cuesta mucho mantener la cantidad de asociados, no es que la gente no quiera colaborar sino que no les alcanza el dinero”, expresó Giletta, quien informó que el grueso de los asociados son asalariados y jubilados.

En la Cooperadora Policial también notaron una caída en los asociados: “Hay una disminución pequeña pero se compensó con la actualización de la cuota”, aseguró el presidente, Omar Carioni. Esta institución posee unos 1800 asociados, siendo la cuota común de 30 pesos.

Donde sí Carioni advirtió una merma es en lo que se recauda en la playa de estacionamiento ubicada en la esquina de las calles Iturraspe y Alberdi: “Hoy el impacto mayor de la crisis lo vemos más en la playa de estacionamiento. El alto costo de mantenimiento nos implicaría subir el valor un 30 por ciento, pero es difícil aplicarlo hoy”, consideró.

En la Asociación Civil Amigos del Bien aseguran que con respecto a los socios se encuentran en “stand by”. Su presidente, Ameris Bessone aseguró que no vienen creciendo: “Desde hace tres meses no podemos crecer”, explicó. La institución tiene 1100 socios que pagan una cuota de 30 pesos mensuales. La estrategia para juntar fondos es la organización de eventos. Los próximos serán un Té Solidario (5 de junio, a las 16 en el salón social de Av. del Libertador (S) 246. Reservas al 426526) y un Taller de Memoria (se iniciará el 7 de junio, de 15 a 16:30. Inscripciones abiertas).

Leer de prestado

Otras de las instituciones emblemáticas de San Francisco es la Biblioteca Popular, que cumplirá 90 años de vida fomentando la lectura. Cuenta con alrededor de mil socios que abonan una cuota mensual de entre 50 y 60 pesos. Y aunque parezca una ironía, en algo la crisis económica los ayuda: “Fuimos aumentando la cantidad de socios, creemos que es por el gran aumento que tuvo el precio de los libros”, explicó a El Periódico su presidenta, Emilia Romanin, quien agregó que la institución renueva y actualiza los títulos de manera constante.

La preocupación actualmente pasa por los costos que van a tener por los servicios de luz, gas, entre otros: “Hicimos los trámites para obtener la tarifa social y estamos expectantes por eso”, dijo Romanin.

Crisis animal

La Sociedad Protectora de Animales también pasa un momento complicado en este 2016. Poseen un refugio de animales que funciona en calle Caseros y las tareas que realizan van desde la alimentación e higiene hasta la curación de los canes.

Mariana Ghigo, presidenta de la institución, explicó que a “esta altura del año hacemos un aumento de la cuota, lo que todavía mucha gente no lo aceptó. Siempre lo consultamos con la gente porque se trata de un aporte voluntario, por eso todavía no se hizo el aumento”, manifestó.

Ghigo resaltó que la Protectora tiene muchos gastos y que además de las cuotas apelan a las ventas porque no reciben ningún aporte estatal, salvo algún subsidio esporádico: “En las ventas se nota la merma de lo que vendés, tiene que ver con la situación económica de la gente y que las escuelas, clubes y otras instituciones también están vendiendo cada fin de semana y en la misma ciudad”.