San Francisco se convirtió en los últimos años en una de las ciudades con más fuerzas de seguridad del interior provincial, mostrando en las calles móviles y personal no solo de Policía de Córdoba, como ocurría una década atrás, sino ahora también de Policía Federal, de la Fuerza Provincial Antinarcotráfico (FPA), Gendarmería Nacional y el reciente Equipo de Tácticas Especiales Recomendable (ETER).

Si se suma la cantidad de uniformados de todas estas –unos 250 efectivos según estimación propia en base a fuentes oficiales-, la cifra se encuentra por encima del estándar recomendado por los organismos internacionales. Cabe destacar que la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito aconseja 300 policías cada 100 mil habitantes y en nuestra ciudad hay más de 62 mil, según el último censo. Claro que dentro de este número hay personal que cumple tareas no operativas o se encuentra de licencia.

El arribo de estas fuerzas es algo que suele destacar el intendente Ignacio García Aresca, fruto de las gestiones propias y también de su antecesor Martín Llaryora. A ello hay que sumarle la puesta en la marcha de la Justicia Federal con sus tres “patas”: Juzgado, Fiscalía y Defensoría Pública, que tienen casi una década de vida por estos lados.

Pese a todo esto, a la hora de preguntarles a los vecinos cuáles son sus principales reclamos, la inseguridad se ubica entre los primeros. Y, en el caso especial de nuestra ciudad, nadie pasa por alto que operan cinco fuerzas distintas cuya función es el resguardo de los ciudadanos.

Necesidad de coordinar acciones conjuntas

La presencia de estas delegaciones y su personal no hace más que obligar a sus autoridades a coordinar acciones en conjunto. Si bien algo ya se trabaja, es necesario –sostienen distintas fuentes vinculadas a la seguridad consultadas- fortalecerlo y obtener mayor seguridad, algo que no abunda ya que los arrebatos en la vía pública y los robos de motos son constantes.

Se considera clave para lograr la seguridad ciudadana el apoyo hacia la Policía de Córdoba, la cual cuenta con personal acotado para la prevención. En los últimos días se sumó el ETER a los patrullajes, sobre todo en barrios lindantes con el camino interprovincial, una zona caliente según el mapa del delito.

El comisario mayor de la Departamental San Justo, Mauricio Rantica, afirmó que de esta manera se incrementa la presencia policial para las tareas preventivas.

Por otra parte, desde el municipio buscan coordinar de una manera más efectiva el trabajo con la Policía Municipal, requiriendo colaboración en los controles en puntos de la ciudad que se consideran “críticos”, como en la periferia, donde actualmente no se llega. Es sabido que este personal no es suficiente y que muchas veces fueron víctimas de violencia en las calles. La intención es que los inspectores sean apoyados por efectivos del CAP, la Federal y Gendarmería, los que irían rotando, de una manera sistemática.

Que se note

Un informe difundido meses atrás por el Centro de Estudios y Proyectos Judiciales, que depende del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), mostró que durante 2018 se iniciaron 1.168 causas penales en los tribunales de San Francisco, que contempla la quinta circunscripción, donde los hechos contra la propiedad encabezaron el ranking: 213 en ese año. En el segundo lugar se encontraban los casos donde hubo lesiones, 171 en total, seguido por los hurtos que fueron 153, entre otros. La mayoría ocurrieron en nuestra ciudad.

Se trata de cifras elevadas que evidencian la inseguridad que viven los ciudadanos, los que se preguntan por las funciones específicas de cada fuerza preventiva que recaló en la ciudad pero que todavía no le devuelven al vecino la tranquilidad que demanda.

Cinco fuerzas policiales conviven en  la ciudad, aunque falta coordinación

Policía de Córdoba

Es la fuerza con más agentes y presencia en la calle. Lo que se observa diariamente es patrullaje de móviles, motos y bicicletas, además de personal de infante. La mitad de su personal suele estar abocado a tareas no operativas y licencia.

Gendarmería Nacional

Sin contar la Policía de Córdoba, la primera fuerza en llegar a la ciudad fue Gendarmería Nacional, que inauguró su sede en 2015 en el Parque Industrial. Cuenta con la Unidad especial de Investigaciones y Procedimientos Judiciales y la Sección de Seguridad Vial San Francisco.

Actúa en casos de delitos federales complejos, como el narcotráfico, la trata de personas o delitos económicos, siendo auxiliar de la Justicia Federal, pero no en la seguridad ciudadana en la ciudad. Otras de las funciones son los controles viales en las rutas nacionales y provinciales, entre ellas la 19, 158 y 1.

En San Francisco son 60 los gendarmes radicados, de los cuales nueve son mujeres.

Fuerza Provincial Antinarcotráfico (FPA)

La FPA funciona desde mayo de 2015 en San Francisco (inauguró su sede en 2016) vinculados a la figura de narcomenudeo. Desde su llegada se cerraron innumerables “kioscos” de venta de estupefacientes en distintos barrios.

La cantidad de efectivos que la componen es un misterio, ya que prefieren no hacerlo público, aunque se estima que son alrededor de 20 en esta zona.

Cuenta con tres guardias con personal operativo que realiza patrullajes e investigadores. Cuando hay allanamientos se refuerza según la necesidad.

Policía Federal

En abril de 2019 se puso en marcha la Policía Federal con su edificio. Está compuesta por unos cien efectivos (entre hombres y mujeres).

Las acciones que llevan adelante son patrullajes en distintos sectores a modo de prevención ciudadana, controles vehiculares y poblacionales en lugares conflictivos. Otro abordaje es el investigativo-criminal con efectivos de civil siguiendo las disposiciones de los juzgados federales e interviniendo en delitos como narcotráfico, trata de personas, acopio de armas y explosivos, contrabando, infracción a la ley tributaria, migraciones, lavado de activos, entre otros.

Equipo de Tácticas Especiales Recomendable (ETER)

La última fuerza en radicarse. Se trata de un escuadrón integrado por 17 efectivos y funciona desde noviembre de 2019. Su función es intervenir en la resolución de situaciones de crisis tales como atentados, toma de rehenes, secuestros extorsivos, allanamientos de alto riesgo y misiones especiales ordenadas por la Jefatura de Policía, algo que está realizando actualmente.