"Les pido a ustedes un favor: que le pidan al Señor que me bendiga antes de bendecirlos yo a ustedes", fue el humilde ruego de Jorge Bergoglio, devenido en el papa Francisco, cuando asomó por el balcón de El Vaticano para saludar y bendecir a los fieles que esperaban conocer al nuevo sumo Pontífice.

En un italiano relajado y sin estridencias ni pompas desmedidas, el papa Francisco se permitió bromear y afirmar: "Parece que los cardenales fueron a buscar al papa cerca del fin del mundo", en alusión a la ubicación geográfica de la Argentina.

El papa rezó por el papa emérito Benedicto XVI y pidió "a Dios que lo proteja y a la virgen que lo custodie".

Antes de despedirse, prometió un reencuentro rápido: "Nos estaremos viendo rápido. Mañana mismo iré a saludar a la virgen. Buenas noches, Buen descanso", concluyó.

Fuente: TN