Tras meses secos, se están produciendo por estos días en San Francisco y la región varios incendios forestales, ya sea de grandes campos en la zona rural como de espacios verdes y baldíos en la zona urbana, que obligan a arduas tareas de extinción por parte de los bomberos.  

Atendiendo a la escasez de precipitaciones, y las altas temperaturas y los fuertes vientos pronosticados, en La Mañana de El Periódico el oficial principal BV Nicolás Alloco compartió valiosas recomendaciones para prevenir incendios de ese estilo.

Alloco detalló algunas estrategias para mitigar los riesgos asociados a esta temporada crítica y en esa línea sostuvo: “En agosto siempre se habla de los vientos y la sequía que estamos transitando nos dificulta muchas veces el trabajo con los incendios forestales. Hay que tener mucha precaución. De hecho hay una ley que prohíbe hacer fuego".

En ese sentido, consultado acerca de las causas por las que se generan estos incendios, advirtió que en la mayoría de los casos la mano del hombre es la protagonista. “La mayoría de las veces son descuidos humanos. A veces uno piensa que no pasa nada y prende la basura creyendo poder controlarlo. Ese es uno de los factores, el descuido humano”.

“Lamentablemente estamos teniendo salidas a lugares a los cuales uno llega y se da cuenta de que no hubo un desperfecto, que es algo que suele suceder a veces cuando hay viento, o que se cayó un tendido eléctrico en la zona rural. Dentro de todos los casos, el factor humano es el principal responsable”, insistió.

Respecto a si una colilla de cigarrillo puede, por ejemplo, dar inicio a un incendio, como muchas veces se habla, afirmó: “Sí, puede encender fuego en un campo, en un baldío. A veces la gente que viaja tira el cigarrillo al costado de la ruta y los vientos inician el fuego. Eso se va propagando rápidamente”.

Por el contrario, comentó que cuando el suelo está húmedo las salidas por emergencias de este tipo se dan en menor cantidad. “Cuando hay lluvias, nuestros días son más tranquilos, pero los meses en los que vienen las sequías, como en estos casos, a los que se les suma el viento, las salidas son más corrientes”, dijo.

En cuanto a la preparación para estas épocas críticas, Alloco apuntó: “Siempre nos estamos capacitando. Cuando llegan estos meses uno sabe que va a tener más intensidad, en el control de los equipos, de los materiales. Siempre nos estamos capacitando en todo, porque lamentablemente en cualquier momento nos llaman para cualquier cosa”.

Recomendaciones

Sobre el final, Alloco brindó una serie de recomendaciones para evitar incendios de pastizales: “Hay que tener cuidado, tener en cuenta que no se puede prender fuego de ningún tipo. A veces a uno le puede parecer que no pasa nada, pero ahí hay que parar y pensar que sí puede suceder. No hay que encender fuego de ningún tipo. Eso nos ayuda a prevenir”.

“Y si uno está en la zona rural, uno puede hacer cortafuegos, caminos entre campo y campo, teniendo siempre a mano disponibilidad de agua. En la parte urbana, los baldíos. A veces los pastizales están altos, y la gente se asusta pensando que a lo mejor el fuego puede ingresar a sus casas y vamos con otra prioridad a esos lugares. Eso hay que tenerlo en cuenta. A veces hay que observar qué se está quemando y qué está cerca. La información precisa de la emergencia a nosotros nos ayuda mucho, porque de acuerdo a eso vamos con un camión o con otro, tocamos una alarma o tocamos la otra alarma”, cerró.