Con la nueva etapa de distanciamiento social que comienza este lunes 8 de junio ante la pandemia de coronavirus, una de las actividades que muchos vecinos, familias y amigos esperan es la de poder reunirse en bares o restaurantes después de más de 80 días. La reapertura de los establecimientos gastronómicos será analizada esta semana por las autoridades municipales, que ya cuentan con el protocolo de seguridad presentado por el gremio Uthgra, que agrupa a trabajadores gastronómicos y hoteleros.

Y este protocolo, que hay que aclarar que aún no fue aprobado por la Municipalidad de San Francisco y que podría tener varias modificaciones, propone estrictas medias de seguridad y numerosos cambios respecto al funcionamiento anterior al aislamiento obligatorio.

El Periódico tuvo acceso al documento y entre las medidas se propone que los bares y restaurantes tengan trapos con lavandina para limpiarse los pies al ingresar, solución con alcohol al 70% para manos, evitar el contacto con otros clientes al ingresar o salir, que sea obligatorio el uso de barbijos tanto para clientes como el personal del lugar y la capacidad de las mesas sería reducida a solo cuatro personas, con excepción de un núcleo familiar más numeroso. 

La capacidad del lugar, por otra parte, se habilitaría como máximo al 75%, según el texto presentado, si bien en el gremio hablan de un 50 por ciento. Las mesas deberán estar separadas por dos metros. Está en estudio si se implementará un sistema de reservas, algo que desde el gremio consideraron que podría no ser necesario y que también podría decidirse por orden de llegada.

Además, se detallan numerosos pasos para mantener la desinfección en todos los elementos del lugar, como la cocina, baños, salón, mesas y sillas, entre otros aspectos. Hasta el punto de que los clientes no deberían tocar la puerta de ingreso y deberán evitar el contacto con otros asistentes.

Los puntos más importantes del protocolo presentado

  • Capacidad máxima habilitada entre 50% y 75%.
  • Colocar dos trapos de piso con lavandina diluida en agua. El primero deberá estar afuera del local y el segundo adentro. Los clientes al ingresar deberán limpiarse los pies en ambos. Deberán cambiarse en promedio cada diez clientes o dos horas. 
  • Mesas deberán estar separadas por dos metros entre ellas o con barreras físicas de plástico, vidrio o acrílico. 
  • Uso obligatorio de barbijos
  • Todas las mesas deberán tener pote con alcohol en gel.
  • Fomentar el pago electrónico a fin de reducir al máximo el intercambio de billetes. 
  • Mesas para cuatro personas máximo, salvo que se trate de un grupo familiar primario de más personas.
  • Delimitar con cinta en el suelo distancia entre la barra o despacho y los clientes, o bien con acrílico o plástico.
  • Mesas y sillas deberán desinfectarse con alcohol al 70% luego de que sean utilizadas y antes de que sean vueltas a ocupar.
  • Envolver los cubiertos lavados y desinfectados en bolsitas individuales. 
  • Se deberán utilizar servilletas descartables de papel.
  • El "servicio de mesa" (pan, hielo, servilletas, aderezos) será provisto en el momento del servicio. Para evitar su contaminación, no deben quedar en las mesas. Las hieleras deben desinfectarse luego de cada uso.
  • Se recomienda cartas plastificadas o digitales. También tener precios y menús a la vista en la entrada o paredes. 
  • En los baños se deberá proveer de jabón líquido y toallas de papel o secadores eléctricos para uso de los clientes. 

Lo que dice el gremio

Juan Molina, titular de la delegación local de la Unión de Trabajadores del Turismo, Hoteleros y Gastronómicos (Uthgra), explicó que no está definida el porcentaje total de superficie que se habilitará, pero estimó que podría ser de un 50%.

"Cuando el cliente ingresa al local tiene que haber un trapo con algún desinfectante, debe haber dispenser con alcohol en la entrada, el cliente debe desinfectarse las manos, tiene que entrar con barbijo se sientan a la mesa con el barbijo y ahí recién se lo quitan. Tiene que haber un dispenser individual para cada mesa con alcohol, cuando el cliente se incorpora para ir a los sanitarios debe colocarse el barbijo. En los sanitarios siempre existen toallas descartables, jabón y demás. Debería haberlo en este momento y lo va a haber", explicó el titular del gremio.

Si bien el protocolo presentado recomienda cartas plastificadas donde describa el menú (que deberán desinfectante después de cada uso), también señala que podrían ser digitales o colocarse precios y platos en carteles en las paredes. Desde el gremio, Molina propone que la carta sea verbal o virtual. "No existiría la carta, sino una carta virtual, cada local lo adaptaría al modo del cliente o la carta verbal en la cual el mozo recomienda lo que tiene para ofrecer", indicó.

"El protocolo que nosotros le hemos presentado a la Municipalidad no significa que vaya a ser así, hemos manifestado que podían ser hasta seis personas, me refiero al grupo familiar porque consideramos que un grupo familiar convive en su casa y puede salir a cenar, a tomar un café, un desayuno. El máximo que les pedimos era de 6 personas", añadió Molina.