El próximo domingo 14 de marzo se realizará la elección interna en la Unión Cívica Radical de Córdoba. Durante esa jornada democrática, se pondrán en juego las autoridades provinciales y de algunos departamentos de la provincia, y la representación en el Comité Nacional.

Marcos Carasso, intendente de General Cabrera, es uno de los aspirantes la lista de Convergencia Córdoba Radical, una alianza Mario Negri y Ramón Mestre, quien tendrá enfrente a Sumar, que postula a Rodrigo De Loredo.

Si bien Carasso había sido consagrado días atrás por la Junta Electoral del radicalismo como presidente del Comité Provincia, Sumar impugnó esa resolución y denunció “proscripción”. Luego, la Justicia determinó que debían ir a interna.

En las últimas horas de campaña, este jueves Carasso visitó San Francisco junto a Martín Lucas, un dirigente de la capital, siendo recibidos por el concejal de la UCR de San Francisco, Cristian Canalis.

- Finalmente habrá internas: ¿por qué no hubo unidad?

Marcos Carasso: Hace muchos años que los partidos se centran más en los personalismos y la figura que en el proyecto de partido que queremos. Todo se ha limitado a un liderazgo momentáneo, sin ese rol de partido que nació para otra cosa y nosotros queremos recuperar. Ese rol que teníamos como instrumento, como herramienta. Donde modifiquemos la forma de participación del afiliado y no acordarnos cada cuatro años de ellos, sino que tenga sentido participar del partido. Sino, el simpatizante va a pensar que una ONG hace cosas que nosotros no hacemos. En el interior hay otra mirada del partido, y hay que tener respuesta inmediata ante el afiliado y el simpatizante, sino nos quedamos en las discusiones entre los dirigentes y no resolvemos cuestiones concretas.

Martín Lucas: Venimos de una crisis muy profunda como partido, se vio reflejada hace dos años cuando presentamos a Córdoba dos alternativas como radicalismo, algo que no había pasado nunca. A partir de ahí hay dos visiones. Una que entiende que el radicalismo debe ir hacia una cosa nueva, sin solución de continuidad, la cual no representamos, y otra donde entendemos que debemos recuperar la autonomía, la identidad y desde allí hacerle una propuesta a la sociedad. Le hace falta a Córdoba una oposición fuerte, nosotros dejamos que este gobierno provincial (por Hacemos por Córdoba) camine solo, sin que le vayan marcando los errores que sin lugar a dudas tiene. Que tienen que ver con una enorme acumulación de poder, con una mayoría agravada en la Legislatura, con un avance sobre el Poder Judicial y además con datos preocupantes de la realidad social. A pesar de ser la provincia productiva por excelencia del país, Córdoba está por arriba de la media en los niveles de pobreza y desocupación. Y, si nadie marca esto como oposición no puede haber una alternativa de este gobierno que llevará 24 años de poder cuando termine este periodo. Si no lo hacemos no estamos cumpliendo nuestra misión histórica como UCR.

- ¿Una vez que pase la interna qué objetivos se van a trazar?

Marcos Carasso: La mejor foto sería el lunes dándonos la mano y mostrando que terminó la interna. Que desde ahí, el primer denominador sea la unidad y eso hay que recuperarlo hacia la sociedad. No podemos armar un proyecto político serio, de alternancia y la gente nos ve tirándonos piedras, esto hay que lograrlo de una buena vez. Además el partido se debe convertir en una caja de resonancia de lo que queremos para Córdoba, con equipos técnicos territoriales, saliendo a las instituciones, animarse a buscar metodologías de las cuales quizás no estamos acostumbrados. Es un trabajo lento, pero dará un resultado. Pero lograrlo solos es una utopía. Por eso necesitamos que se acerque más gente, más partidos. Hoy hay que enderezar la columna vertebral nuestra e invitar luego a otros partidos y organizaciones a armar otros proyectos de alternancia concretos, que representen a los vecinos de la provincia.

Martín Lucas: Hay muchos esfuerzos del radicalismo de ir marcando esta serie de cosas. Lo que hacen los legisladores y concejales de las ciudades individualmente, pero esos esfuerzos individuales se diluyen sino hay un partido que los aglutine. El primer paso es trabajar desde la conducción para la unificación de los bloques parlamentarios en la Legislatura porque tenemos radicales en dos bloques distintos y eso debe normalizarse.

- ¿Siguen proponiendo una alianza sin salirse de Juntos por el Cambio?

Hay que hacerse cargo de las decisiones tomadas. En un ámbito de debate en un partido político si la mayoría piensa una cosa, la minoría debe aceptarlo, pero tampoco creerse la mayoría que puede regalar el partido. La primera etapa desde el lunes será la reconstrucción partidaria.