El presidente Javier Milei vetó este viernes la ley de reforma jubilatoria que se había aprobado la semana anterior en el Congreso.

El mandatario ya estampó su rúbrica en la noche de este viernes, aunque recién el lunes se publicará su resolución en el Boletín Oficial.

Como se preveía, Milei firmó el decreto luego de haberse reunido hoy en la Casa Rosada con los bloques de diputados dialoguistas, quienes le dieron su respaldo para el veto.

Del encuentro con legisladores del PRO, el MID y La Libertad Avanza (LLA) participaron la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, y el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, por pedido del propio mandatario.

Durante la reunión, el Presidente se entrevistó primero con los jefes de bloque Cristian Ritondo (PRO), Oscar Zago (MID) y Gabriel Bornoroni (LLA), para después pasar a una cita "ampliada" con el resto de los legisladores que integran esas bancas.

Estuvieron presentes diputados como María Eugenia Vidal, Luciano Laspina y Diego Santilli, del PRO, y senadores libertarios como Bartolomé Abdala, Vilma Bedia y Ezequiel Atauche, entre otros.

Además, estuvieron presentes los legisladores Silvana Giudici, Alejandro Bongiovanni, Nadia Márquez; José Peluc; Pablo Ansaloni; Nicolás Mayoraz; José Luis Espert; Lisandro Almirón; César Treffinger y Alberto "Bertie" Benegas Lynch.

Fuentes oficiales indicaron a NA que Milei detalló ante los legisladores los motivos del veto y buscó garantizarse los dos tercios necesarios para evitar que la oposición parlamentaria pueda restablecer la ley.

De esta manera, el mandatario logró sumar los respaldos necesarios de la oposición dialoguista para contrarrestar las intenciones de algunos bloques parlamentarios de mantener firme la actualización jubilatoria después del anuncio de la impugnación. 

Cuáles son los puntos básicos de la nueva Ley de Movilidad Jubilatoria

Básicamente la iniciativa mantiene el esquema de actualización por inflación aprobado a través de un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) firmado por el presidente Javier Milei, pero le suma un incremento adicional del 8,1% a los haberes de abril (el Gobierno había otorgado un incremento del 12,5%), con el objetivo de completar el 20,6% de inflación correspondiente a enero.

Además, se dispone que el haber mínimo no podrá ser inferior a 1,09 canastas básicas por adulto (que publica mensualmente el INDEC y define la línea de pobreza), lo que equivale a $ 321.600, $ 15 mil más que el monto de junio.

Finalmente, el proyecto propone que la fórmula de movilidad no dependa sólo de la inflación, sino que también tenga en cuenta los salarios. De esta manera, en caso de que el índice de inflación quedara por debajo del de Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estatales (RIPTE), los jubilados recibirían el 50% de esa diferencia a través de un ajuste semestral.

Según estimaciones de la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC), los cambios en la movilidad significarían un gasto extra del 0,45% del PBI en todo el año. Sin embargo, el comunicado de la Oficina del Presidente afirma que la ley “implica un gasto del 1,2% del PBI, o lo que es lo mismo, 25% del PBI en términos dinámicos, obligando al Estado a contraer deuda que deberán pagar en el futuro los jóvenes argentinos”.

Con información de NA