Estudiantes del Cres diseñaron productos educativos para Apadim: la historia detrás del proyecto

¿Cómo mejorar la vida del otro? Una pregunta tan sencilla y compleja al mismo tiempo es la que encontró parte de la respuesta en un proyecto que unió al Centro Regional de Educación Superior (Cres) y Apadim. 

Sucede que los estudiantes de 2° año de Diseño Industrial (DI) de la sede San Francisco realizaron y entregaron elementos para un espacio de educación somática en Apadim. Este proyecto nació meses atrás a partir de la firma de un convenio de cooperación entre dicha institución y la Universidad Nacional de Villa María (Unvm).

Los impulsores fueron los docentes de Apadim, Gastón Rassetto e Inés Rojo. Ellos decidieron crear un proyecto que ayude al aprendizaje de chicos que van a esta escuela. 

“Nosotros presentamos un proyecto que se llama educación somática a partir de nuestras áreas. Gastón es profesor de Educación Física y yo Psicomotricista. Está dirigido al Nivel primario y para eso necesitábamos elementos específicos y muy costosos, por eso decidimos trabajar con el Cres", explicó Rojo.

Al plantearse este desafío los que pusieron manos a la obra fueron los chicos que cursaban la materia Ergonomía de 2° año. Entre otras cosas allí abordan la usabilidad de los productos y en este caso se aplicaron los conocimientos a la discapacidad.

Alternativa

Rassetto y Rojo se inclinaron por la educación somática porque incentiva la actividad de los estudiantes. Los objetos son “mediadores de la actividad” desde este punto de vista.

“Decidimos hacer el proyecto conjunto entre las dos áreas Educación Física y Psicomotricidad. El punto en común en la educación somática. Es una propuesta donde se pone al cuerpo como protagonista. Buscamos actividades con objetos precisos que permitan a los chicos ser protagonistas y no receptores pasivos de estímulos”, describieron. 

Además aclararon que si bien los destinatarios son alumnos del Nivel Primario otros grupos y docentes pueden retomar la idea y aplicarla. “Hay más población que se puede beneficiar de estas propuestas y objetos algo que puede hacerse con otros docentes y es transversal”.

Los proyectos que se basan en la educación somática generalmente están asociados a las salas multisensoriales, pero desde Apadim aclararon que ellos adaptaron los conceptos porque estos espacios son muy costosos de desarrollar.

Sorpresa

Cuando inició el proyecto en agosto Pablo Pérez, uno de los docentes involucrados en la propuesta contó a El Periódico que el objetivo era desarrollar un elenco de tres a cuatro de estos productos.

Esta semana con el cuatrimestre los protagonistas de esta historia fueron a Apadim con el objetivo más que cumplido. Los estudiantes confeccionaron 10 elencos o familias de productos - cada uno compuesto por 3 objetos - que totalizan 30 piezas para trabajar. 

La variedad y amplitud también tiene una razón: "Para la persona que tiene discapacidad puede tener un sentido distinto al definido, por eso se necesitan productos que puedan ser usados por las personas independientemente de su condición”, había dicho el docente de Ergonomía. 

Aprendizaje mutuo

El resultado se explica por el compromiso, pero también el conocimiento que tuvieron desde ambas instituciones a través de encuentros. Esto dejó muy satisfechos y esperanzados a los docentes.

Rassetto indicó: “A lo largo de los encuentros los dos aprendimos cosas del otro. Ellos vinieron acá, un grupo conoció a los chicos y en base a eso fueron desarrollando los elementos. En la presentación supimos cuáles eran los elementos, nos dimos cuenta de cómo nos escucharon para realizarlos”. 

Es por ello que conocer la realidad del otro es y fue muy importante para el éxito de esta propuesta. Rojo subrayó que los jóvenes “tuvieron mucha receptividad en cada encuentro y les sorprendió la pertinencia de las preguntas en cuanto al aprendizaje de los niños con discapacidad para entender qué debían diseñar”.