Wanda Nara se quebró al hablar de la situación que vive Mauro Icardi en el Inter de Italia, ya que aún no pudo renovar el contrato y peligra su continuidad en el club donde ya convirtió 122 goles.

"Algunos dicen que el brazalete (de capitán) no tiene sentido, pero para Mauro es como quitarse una pierna mas que un brazo", confesó este domingo en una nueva emisión de Tiki-Taka.

Wanda aseguró que el padre de dos de sus cinco hijos siempre prioriza al Inter por sobre el dinero, por lo que espera que el conflicto se resuelva pronto.

"Lleva esa camiseta con mucho orgullo y, si en el pasado se han tomado decisiones sobre el dinero o el amor por la camiseta, siempre elige la camiseta", declaró.

La bronca de la esposa y también representante del futbolista fue enterarse a través de Twitter que le quitaran la capitanía. "Había tenido una reunión de tres horas con gente muy alta en el club y nunca me explicaron los motivos de la decisión", sostuvo.

Tras el llanto de Wanda, el consejero delegado del club nerazzurro, Beppe Marotta, sorprendió saliendo al aire en el programa. “Nosotros queremos apagar esta polémica, devolverle serenidad a todos, en primer lugar, a Wanda y Mauro. Sacarle un brazalete no fue un castigo, si somos una familia a veces los padres tienen que tomar decisiones duras para que los hijos crezcan. Le explicamos la decisión personalmente a Mauro, he visto a Wanda llorando y eso lo siento”.