Tal fue la huella que dejó en San Francisco el plantel de San Isidro que llegó a la final de la Liga Argentina, que el pequeño Juan Ignacio Actis cumplió 7 años el pasado domingo y lo festejó con una torta de James Cambronne.

"Juani" no quiso otro decorado porque su jugador preferido es James y su mamá Analía tuvo que cumplir con esa exigencia. Juega en la división mosquitos de El Ceibo, club por el cual tiene un gran afecto, pero las finales de la Liga Argentina y el desempeño del jugador haitiano-estadounidense se llevaron todas sus miradas.

Su papá contó cómo surgió esta admiración por James. "Yo jugué siempre la básquet y desde que nació siempre lo llevé conmigo. A San Isidro, El Tala, El Ceibo, viene con un empuje de básquet muy importante y este año, teniendo ya 6-7 años empezó a entender mucho más, hizo un click porque su tío es Sebastián Torre, eso le dio muchas consideraciones que lo motivaron a verlo de esa manera...", explicó Osvaldo Actis.

"Yo le decía que el mejor jugador de San Isidro es Santi González, porque es compañero, porque empuja, alienta y ese es el mensaje que le quería dar yo, pero Juani eligió a Cambronne porque se destacaba y le gustaba su juego", dijo su papá.

"La campaña que hace San Isidro no fue igual que las otras, entonces él escucha y ve todo lo que se generó con la cancha siempre llena, cantando, eso lo motivó a que se enganche mucho más de lo que estaba enganchado", indicó.

Había que esperar

"Mi señora se dedica a hacer tortas, es su trabajo, y ahí surgió la idea por pedido de él... La anécdota es que había que esperar, él quería que esperen para hacer el muñeco porque si ascendía quería que tenga una copa en la mano, sino lo hacía con la pelota sola...", contó Actis entre risas Actis.