Una fuerte polémica se abrió en el Federal A luego del bochornoso partido entre Estudiantes de Río Cuarto y Central Córdoba de Santiago del Estero, que debió suspenderse cuando el partido estaba empatado 2-2 luego de que hinchas locales invadieran el campo de juego disgustados con los fallos del árbitro Luis Lobo Medina

En plena madrugada, a las 4:25, el club publicó en sus redes sociales un comunicado en el que responsabiliza exclusivamente al árbitro y lo acusa de haberles robado el partido. "Nos robaron", es el título del texto, en el que se dedicó a cuestionar la actuación del juez, aunque no menciona en ningún momento los graves hechos de violencia en el que terminaron involucrados jugadores y cuerpo técnico de ambos equipos.

"Podríamos buscar cualquier calificativo para describir lo que sufrió Estudiantes anoche en su estadio, pero el único que define puntualmente lo sucedido es robo. Cuando el celeste, de la forma en que lo hizo en todo el campeonato, salió a ganar un partido jugando al fútbol, se consumó la canallada. Luis Lobo Medina y sus asistentes se ocuparon personalmente de que Estudiantes no se quedara con un partido por el que había hecho todos los méritos. Cada vez que Estudiantes superaba a su rival jugando, aparecía esa mano que en lugar de impartir justicia, sancionaba sin causas a todo aquel vestido de celeste", describe en el primer párrafo.

La respuesta de Central Córdoba

Por otra parte, Francisco Pece, presidente de Central Córdoba, fue contundente con sus declaraciones, sobre todo al referirse al ex jugador de ese club, River y la Selección Nacional, Pablo Aimar, hoy entrenador del seleccionado sub-17 y que forma parte del cuerpo técnico de la Selección mayor que dirige Jorge Sampaoli.

“Fue un hecho lamentable, realmente, desde que llegamos al estadio les dije a los directivos que me resultaba extraño que un partido de tanta envergadura haya solo veinte policías, no se si eran menos. Yo responsabilizo a los directivos de Río Cuarto, ellos instigaron a todos esto y más me sorprendió fue verlo a Pablo Aimar al frente de todo este hostigamiento, sobre todo en el entretiempo cuando fueron a apurarlo al árbitro”, le dijo Pece a Diario Panorama.

Por otra parte, medios santiagueños aseguraron haber vivido una "noche de terror", sin poder salir del estadio hasta horas después y además sufrir la rotura de sus vehículos. "Varios periodistas que fueron a cubrir el partido también pasaron un angustiante momento. Algunos sufrieron la rotura de sus vehículos y otros fueron amenazados", indicó Diario Panorama.