Los goles de Jo (St. 1m.) y Leonardo Silva (St. 41m.) estiraron la definición a los remates desde el punto del penal, ya que en el cotejo de ida, el combinado paraguayo se había impuesto por el mismo resultado.

En la vía de los penales, el conjunto brasileño mostró una efectividad ideal y convirtió los cuatro remates que ejecutó. Olimpia, por su lado, sumó tres, el arquero Víctor (adelantándose notoriamente) se lo atajó a Miranda y el argentino Matías Giménez (ex Belgrano) falló su disparo.

De este modo, el conjunto de Belo Horizonte, el de mejor record en la fase inicial del certamen, pero el que sufrió horrores para dejar en el camino a Tijuana (cuartos) y Newell's (semifinal), se consagró campeón de la Libertadores, por primera vez en su historia.

Los anteriores títulos internacionales del "Galo" se había dado en sendas Copas Conmebol (1992 y 1997).