El Nacional de Baby Fútbol se transformó en una tradición de ciudad de San Francisco y con ella cientos de historias de chicos que no se lo quieren perder por nada del mundo. Paolo Rodríguez, nieto del ex jugador de Sportivo Belgrano Eladio Rodríguez e hijo de Mariano Rodríguez (también ex jugador de la “verde”), también dijo presente este año en la competencia..

Paolo nació en Argentina pero de muy chico emigró junto a su padre a Ecuador. Mariano iba a venir con un equipo de aquel país para participar de la competencia. No pudo cumplir ese deseo pero sí le pudo cumplir el sueño a su hijo que disputa el Nacional con Defensores de Iturraspe.

El joven, que viste la casaca 7, sueña con quedarse con el título y agradeció poder vivir esta experiencia. “Estoy muy agradecido con mi padre porque esforzó mucho para traerme. Me trataron muy bien mis compañeros y la adrenalina que se genera en cada partido es increíble”, comentó Paolo con una marcada tonada ecuatoriana.

“Yo juego en la academia de mi papá “Pibes de Oro”, pero acá los jugadores son más pícaros y juegan mejor a la pelota, por eso salen muchos jugadores”, agregó.

La debilidad de don Eladio Rodríguez

Es el único nieto que se dedicó al fútbol y a Eladio eso le llega. “Me han hablado mucho de lo que ha hecho mi abuelo, me dijeron que fue un jugadorazo. Mi papá siempre me contaba lo que había hecho”, señaló Paolo.

El ex jugador de Sportivo Belgrano comentó que visitó todas las canchas donde jugó. “Tengo 5 nietos y es el único que salió futbolero, espero que llegue, yo siempre le manifiesto que hay que ser atento, hoy el futbol es muy vivaz y muy pícaro. Tratamos de aconsejarlo”, comentó Eladio.

“El fútbol ha cambiado mucho, en nuestra época nosotros no teníamos quien nos asesorara y aconsejara, éramos nosotros y el campito”, añadió el recordado futbolista.

La lucha por Barrio Jardín

Eladio Rodríguez es el entrenador de la categoría 2009 de Barrio Jardín, este año comienza a competir por los puntos pero su lucha se enfoca en sostener la identidad del barrio. “Lo que más me preocupa es que quieran sacar al club de donde está, yo vivo a una cuadra y hace 52 años que Barrio Jardín trabaja con los chicos, es parte del barrio”, aseguró.