"Te deja indignación, impotencia, mucha bronca. Te arruina la vida, porque una trabajó mucho para tenerla. Ahorré hasta que la pude comprar y me sentía la mujer más feliz. Es muy injusto e indignante, no tengo palabras", manifestó Graciela, una mujer de 55 años que el pasado miércoles 18 sufrió el robo de su motocicleta sobre calle Santa Fe al 1400 y desde entonces se quedó sin el medio de transporte que utilizaba a diario.

Su tarea como enfermera en un centro de salud local es una de las tantas ocupaciones que queda exceptuada del aislamiento preventivo y obligatorio ante la pandemia del coronavirus, por lo que Graciela debe seguir asistiendo a su trabajo, aunque ahora ya no cuenta con su moto.

La moto que le robaron era una Honda Biz color blanca, patente 914LNT. Quien pueda aportar datos puede compicarse a los teléfonos 3564 502640 y 3564 300617.

Graciela aseguró que hizo la denuncia de inmediato a la Policía, pero hasta la fecha no tuvo ningún resultado. Y agregó que a los pocos días también robaron otra moto en esa zona.

Rescate carísimo

Además, a los pocos días de que se la robaron recibió un llamado de los presuntos ladrones en el que le pidieron 30 mil pesos para devolvérsela, una cifra que la mujer está muy lejos de poder pagar. Ante esto, no volvió a tener noticias de su moto.

"La tenía nueva, la usaba todos los días para ir a trabajar y hacer las compras. ¿De dónde quieren que saque esa plata? Encima con todo esto que estamos pasando, mis amistades viven al día", resumió la mujer a El Periódico.