En 1963 las Industrias Aeronáuticas y Mecánicas del Estado (IAME), que era un conglomerado de fábricas argentinas creado en 1951 por Juan Domingo Perón para promover la fabricación de aeronaves y automóviles, comenzó a fabricar la quinta serie de las motos Puma 200 cc.

Sin embargo, el comienzo de las privatizaciones y la caída de la industria nacional hicieron que haya pocas unidades en la calle. En 1964 se fabricaron 745, pocas quedan en la actualidad y una de ellas está en San Francisco.

Se trata de la Puma 200 cc. restaurada de Edgardo Canalis, vecino de la ciudad, que tiene el 99% de las piezas originales. “La moto la compró mi viejo en el ‘64, yo era chiquito y vivía en Luxardo”, recordó. “Después me vine a estudiar a San Francisco, años más tarde me fui a estudiar a Córdoba y después me fui a Formosa. Me olvidé y ni me acordaba que existía la moto. Era de mi papá y de mis tíos, que ya todos murieron. En 1998 mi tía me pregunta si no la quería, me dijo que estaba tirada en el campo. Bueno, me acordé y la fui a buscar con la camioneta”, explicó Edgardo.

E indicó: “La desarmé toda, hubo que pintarla, tapizarla, cambiarle algunas cosas, pero no necesitaba mucho. Había que enarenar, pintar con el color original, el fileteado original, cromados”.

Una joya en San Francisco

“Conseguí todos los papeles, las patentes, mi viejo tenía todo muy ordenado, me fui al registro en aquella época y la empadroné a mi nombre, me dieron la patente nueva así que eso le da más valor a la moto”, dijo Canalis.

Conseguir repuestos

Canalis contó que actualmente, con el avance de las redes sociales, es más sencillo conseguir los repuestos, pero en 1998 era algo complicado. “Conseguí algunas cosas en San Francisco, en un local que estaba al frente del Sanatorio San Justo, ahí me dieron una tarjeta para ir a Córdoba, en barrio Alberdi, a un lugar que ni cartel tenía, ahí me regalaron el manual de despiece y algunas cosas que necesitaba”, explicó.

A la vez, mencionó: “Creo que ahora es más fácil conseguir las cosas, antes era de boca en boca, ahora hay varios grupos de motos Puma donde vos ponés qué necesitás y enseguida te contesta gente. En esa época no había nada”.

“Y de este modelo hay poco y nada. De primera, segunda y cuarta serie hay mucho, pero de quinta serie poco y nada”, sentenció.

Una joya en San Francisco

Una locura que no fue

“La tenía casi vendida, venían a comprármela desde un pueblo de acá cerca, pero mi yerno me dijo que no la venda, que quede en la familia. Menos mal, ahora va a quedar para mi futuro nieto Ramiro”, señaló Canalis.

Una joya en San Francisco

En marcha

“La puse en marcha en el ‘98 pero la usé muy poco. La moto es pesada y yo tengo problemas en la columna, además se me ahogaba y necesitaba conseguir la aguja del carburador. La dejé en el garaje de mi vieja, no se usó más hasta hace un par de meses que la sacamos de nuevo, la limpiamos. Estaba llena de tierra nomas, estaba bajo techo”, indicó.

“La lavamos y quedó de 10, enseguida arrancó, le limpiamos el tanque y el carburador. Cambiamos los retenes, y algunas pequeñas cosas nomas. Lo único que me falta es la tripa del velocímetro, tengo que ir a hacerla nomas y lo único que no es original es una de las palancas de freno”, explicó Canalis.

“La idea es dejarla lo más original posible, me invitaron al desfile del 25 de Mayo, pero la estábamos limpiando. Seguramente el año que viene iremos”, concluyó.