Hace unos dos años nació en San Francisco la agencia Triunfar que tiene como objetivo representar jugadores en la élite del fútbol argentino. Si bien comenzó con la idea, que se mantiene, de asesorar a jugadores de inferiores del interior, en los últimos años desembarcaron en el fútbol femenino y actualmente representan a varias jugadoras de Primera como Brenda Molinas -arquera de River-, Betiana Sonetti -lateral de River- o Laura Sampedro, la defensora de Independiente también de Selección.

La profesionalización del fútbol femenino en Argentina, aunque todavía precaria, hizo que las jugadoras tengan la necesidad de contar con una representación para conseguir mejores contratos, sponsorización y un nexo con los clubes de Europa, donde -al igual que pasa con el fútbol masculino- los contratos y las condiciones son mejores.

En ese marco, Gustavo Gualdoni y Pablo Franchino son dos sanfrancisqueños que comenzaron a trabajar con una visión de asesoramiento para con los jugadores del interior que llegaban a clubes como Colón o Unión dando los primeros pasos en estos clubes de elite. De a poco fueron ganando terreno en un ambiente complicado donde las ofertas y las promesas llueven, y la confianza es un factor determinante.

Una agencia de representantes de San Francisco se hace fuerte en el fútbol femenino
Gualdoni y Franchino junto a Nazareno Luque de Colón de Santa Fe.

"La idea nuestra es que un chico de Antártida, Sportivo o Crecer pueda llegar a un club primera división con otra formación y ya con un representante manejando el ingreso al club, el seguimiento. Hoy el jugador más chico que tenemos es Román Ibarra, categoría 2007, que terminó el baby y lo llevamos a Colón. Con el tema de la pandemia prácticamente no pudo hacer nada, pero ya el año pasado jugó para Colón y este año ya vivía en Santa Fe, había empezado la escuela. Toda esa gestión la hacemos nosotros, el objetivo es llevar un chico y firmar convenios", explicó Gualdoni.

¿Se puede decir que la confianza por ser de la ciudad, del interior es una de las mayores virtudes de la Agencia?

Sí, una de las mayores virtudes que desarrollamos es justamente esto, la confianza, la seguridad y la claridad. Ser frontales. Hoy hay muchos chicos que están buscando representantes de los cuales nosotros tratamos de ver todos los materiales y después evaluamos cuál está para representar y cual necesita madurar un poco más. Nos encontramos con esa confianza, la gente nos busca por eso, porque somos del interior y el mercado más fuerte lo tiene Buenos Aires con una gran cantidad de agentes, pero también ese es un mercado inseguro, hemos encontrado muchas cosas raras y una de las cosas que nosotros desde un principio mostrar es la cara de quienes somos los dueños de la agencia. Trabajamos mucho con redes sociales, hablamos directamente; pero también no depende exclusivamente de nosotros que el chico consiga club porque hay muchos factores: dirigentes, el entrenador, el plantel, el momento del equipo... Nuestro objetivo es el éxito del jugador.

"Nosotros hacemos representación, pero hay gente que no hace representación y hace intermediación porque no es fácil entrar a los clubes, ellos ya tienen sus representantes exclusivos. En este ambiente hay muchos abogados porque tiene mucho que ver la parte de derecho laboral", señaló Gualdoni.

¿Los jugadores eligen o a veces hay que convencerlos? Pensando en que puede tener más oportunidades en un club que en otro...

Pasa de las dos maneras. Por ejemplo, hay chicos que jugaban en Colón, pero termina en Unión porque por ahí el entrenador de Colón no lo tenía en cuenta, o viceversa. En ese sentido no tenemos banderas, trabajamos para todos los clubes, salvo que algún jugador me diga que no. Me pasó que una jugadora de Vélez me dijo que no quería irse de Vélez a menos que surgiera algo de Europa, porque era capitana, porque tenía un gran sentido de pertenencia y porque no quería perder todo lo logrado en Vélez. Vélez está en Primera C y tranquilamente ella puede jugar en Primera...

Una agencia de representantes de San Francisco se hace fuerte en el fútbol femenino
Franchino y Gualdoni junto a Emiliano Arato, arquero de Atlético de Rafaela.

¿Cómo se lidia con los padres de los más chicos? 

Hay de todo tipo, los que delegan todas las responsabilidades a nosotros y tenemos los que participan dentro de las decisiones y colaboran. Yo digo que la familia tiene que ser un acompañamiento fundamental que no puede dejar de estar porque el jugador llega no tanto por lo deportivo sino también por la cuestión psicológica, por la motivación, son herramientas que forman parte de la cabeza del jugador de fútbol, tené en cuenta que hoy un chico de 13 años se tiene que ir a vivir solo a una pensión, los padres son fundamentales en eso.

Sabemos cómo manejarlo. Dejamos libremente que participen, están los soñadores: el padre que creen que su hijo va a jugar en el Barcelona y otros que son más pacientes.

Vínculo

"Tenemos dos modelos de vinculación con la agencia: contrato de representación que se firma por tres años y un paso intermedio que es el contrato de mandato que es una autorización de una jugadora o jugador para ofrecerlo como si fuera de la agencia, pero sin firmar un contrato. Si se le consigue club se firma el contrato", explicó Gualdoni.

¿Cómo llegan al fútbol femenino?

Hoy el fútbol femenino está en ascenso, nosotros hace un año que estamos en el rubro y notamos que cada vez aparecen más agencias de representación de fútbol femenino. Al principio había un cierto número, hoy todas las agencias importantes anexaron femenino y antes no tenían vinculación.

Esto nos dio la posibilidad de llegar a clubes de primera más importantes como representar a Brenda Molinas y Betiana Sonetti ambas de River, a Magali Molina enganche de Independiente. Laura Sampedro central de Independiente y de la Selección.

Crece mucho constamente y el año que viene va a ser obligatoria la reserva así que ya estamos captado sub 17. Ya estuvimos charlando con Yamila Crespín de San Jorge que es de Selección, hemos hablado con varias, pero ya se pone competitivo el mercado con muchas vinculaciones en Europa, España, Italia, Centroamérica, Brasil con agente asociados para moverlas.

"Tenemos jugadoras de Selección, como la arquera del seleccionado de Ecuador, la central de Perú, con ellas tenemos mandatos porque la finalidad es que nosotros la representemos siempre y cuando le consigamos club, hoy como no tenemos seguridad que le consigamos un club prefieren tener un mandato, pero si conseguimos un club automáticamente firmamos el contrato de representación", dijo Gualdoni

¿Qué tan distinto es representar a una jugadora de primera comparado con un jugador?

Jugadores en primera no tenemos, hay proyectos de jugadores que están a un año de debutar. Pero con respecto a las jugadoras, hoy no tienen ningún tipo de pretensión como un jugador. Están muy en inferioridad de condiciones económicas con respecto al masculino, hoy un sueldo de Primera debe estar en 40 mil pesos, bien pago, otras en 20 mil en clubes de elite.

Notamos que el requerimiento es distinto, por ejemplo: representar a un jugador como Otamendi es muy demandante, una jugadora de selección Argentina no tiene la misma demanda.

Pasa con las marcas deportivas, que se los manejamos nosotros, y todavía están muy atrasadas en esponsorización de jugadoras. Las marcas de guantes sí, nosotros trabajamos con una marca de guantes de EEUU porque representamos a Gabriela Caballero -hermana del arquero Wilfredo Caballero- y los arqueros nuestros tienen todos los guantes de esa empresa que vienen por patrocinio. Con respecto a botines todavía no, viene muy atrasado eso, tienen que ser jugadoras de Selección y de mucho nivel, pero en cualquier momento vamos a tener patrocinios como el de Nike.

"River está muy avanzado con respecto al trato de jugadores y jugadoras, con la marca de indumentaria, en alimentación, todo. River tiene un staff de 10 personas trabajando atrás de las jugadoras como psicólogos, kinesiólogos, asistentes, entrenador de arqueros, prensa y todo solo para el femenino. Eso lo debe tener solo Boca, el resto no.", explicó Gualdoni.

¿Qué vínculos internacionales tienen?

En el  fútbol femenino los mercados fuertes son España e Italia, justamente hace poco nos entró un pedido del Napoli que quería una mujer que juegue de 10, en cierto modo para homenajear a Maradona. En el Napoli, que está en primera el sueldo promedio es de mil euros, con casa, comida y tickets aéreos.

Tenemos una alianza con una agencia italiana, en España trabajamos con la agencia Solo Cracks, que es una de las más reconocidas, a cargo de Edgar Merino.

En Honduras también tenemos alianzas que manejan el fútbol femenino de centroamérica, México, Panamá, Costa Rica, Ecuador y una alianza en el mercado brasileño, pero hoy el mercado que demanda más jugadoras argentinas es España.

¿Buscan a las jugadoras argentinas por el mismo motivo por el cual buscan jugadores argentinos? 

Sí, las jugadoras argentinas son muy habilidosas, se busca por ese tipo de ventaja que tienen, pero como desventaja las argentinas no tienen el ritmo de las europeas. Hoy las argentinas caminan la cancha en Europa y tienen que tener un proceso de adaptación, eso es por la falta de desarrollo y la profesionalización reciente del fútbol femenino en Argentina.

Hoy se llevan lo mejor, pero a las argentinas les falta rodaje, físicamente tienen que ponerse al nivel de ellos.