La Organización Mundial de la Salud informó este fin de semana que ya hay 42 países en el mundo que han iniciado sus campañas de vacunación contra el coronavirus. En total, y de acuerdo a datos proporcionados por la agencia Bloomberg, en su última actualización se reporta que hasta el 9 de enero había 25.839.924 personas inoculadas. 

Argentina comenzó con este proceso antes de fin de año, cuando llegó desde Rusia el primer lote de 300 mil dosis que están siendo distribuidos entre personal de salud. 

De acuerdo al citado estudio de la agencia Bloomberg, China es el país con más inoculados hasta la fecha. Son 9.000.000 los registrados. Le siguen Estados Unidos (8.017.552) y el Reino Unido (2.000.000). A nivel sudamericano Argentina encabeza este ranking: está ubicada 14 en el mundo con 107.542 personas ya inoculadas.

En paralelo, durante la rueda de prensa regular de la agencia en Ginebra, el director general Tedros Adhanom Ghebreyesus recordó que la OMS organizó una cooperativa internacional de vacunas, COVAX, la cual ya tiene contratos para 2.000 millones de dosis, que empezarán a ser distribuidas entre los países de ingresos medios y bajos tan pronto como estén disponibles.

 
Tedros dijo que la cooperativa de vacunas tiene una posición preferencial para obtener 1.000 millones de vacunas adicionales. Pero 42 países, 36 naciones ricas y seis naciones de ingresos medios, ya están ejecutando programas de vacunación, lo que deja sin vacunas disponibles a los países en vías de desarrollo.

Ahondando en el problema, Tedros sostuvo que los países de ingresos medios y altos, que son parte del programa COVAX, están alcanzando acuerdos adicionales para bilateralmente obtener más vacunas. “Esto potencialmente hará que el precio suba para todo el mundo y significa que personas de alto riesgo en países más pobres y marginalizados no recibirán la vacuna”, afirmó.

El jefe de la OMS dijo que el acaparamiento de vacunas por parte de los países ricos, a lo que se refirió como “nacionalismo de vacunas”, es contraproducente y afecta al mundo entero. Por otra parte, Tedros dijo que compartir equitativamente las vacunas salva vidas, estabiliza los servicios de salud pública y ayuda a que la economía mundial se recupere más rápidamente.