En abierto desafío a la comunidad internacional, el gobierno norcoreano confirmó este domingo que los movimientos telúricos registrados en la península de Corea fueron causados por la prueba "exitosa" de una bomba de hidrógeno que afirmó que puede ser instalada en uno de sus misiles balísticos intercontinentales.

La confirmación fue realizada por la televisión estatal norcoreana KCTV, que informó que "el test fue realizado con una bomba con un poder sin precedentes", que constó de "dos fases" y que no se ha producido "ninguna fuga de materiales radiactivos ni impacto adverso en el medio ambiente".

Además, la cadena oficial señaló que el nuevo ensayo atómico se llevó a cabo con un artefacto que se puede cargar en los misiles balísticos intercontinentales que ha desarrollado el país.

El nuevo ensayo armamentístico norcoreano fue ejecutado por orden directa del líder Kim Jong-un, según la KCTV, que mostró fotografías del mandatario en su despacho y sus habituales imágenes propagandísticas sobre anteriores lanzamientos de misiles. 

La potencia de la detonación detectada por los organismos geológicos de países vecinos indica que se trató de un ensayo mucho más potente que los cinco anteriores ejecutados por el país asiático y que produjo un fuerte terremoto de origen artificial fuera detectado cerca de la base norcoreana de pruebas nucleares de Punggye-ri, informó la agencia española de noticias EFE.

Ensayos

La cadena oficial de noticias KCTV, difundió imágenes de Kim Jong-uh de visita a una fábrica de armas nucleares y fue testigo de cómo la bomba era cargada en un misil.

El mismo medio distribuyó una fotografía de Kim junto a la supuesta bomba H acompañado de científicos nucleares y altos oficiales del Departamento de Industria de Municiones del Partido Central de los Trabajadores, aunque, como es habitual, no dio detalles del lugar ni la fecha del acto.