Un hombre de 30 años fue condenado este jueves en Mar del Plata a la pena de 14 años de prisión acusado de haber asesinado a balazos a su mejor amigo tras una discusión y ocultar su cuerpo debajo de un montón de basura en un descampado, informaron fuentes judiciales.

Se trata de Cristian Ariel Calvo, quien fue sentenciado por el homicidio de Cristian Iván Zubillaga (24), ocurrido el 27 de febrero de 2008 en la localidad balnearia.

Los integrantes del Tribunal Oral en los Criminal 2 (TOC 2), hallaron culpable a Calvo del delito de "homicidio agravado por su comisión con arma de fuego".

La pena fijada por los magistrados fue en línea con el pedido realizado durante los alegatos del juicio por el fiscal que intervino en la investigación del caso, Fernando Castro, titular de la Unidad Funcional de Instrucción 1.

Si bien el abogado de la familia de la víctima, Osvadlo Verdi, había pedido durante el debate oral una pena de 19 años para el acusado, tras la lectura del fallo del TOC 2 en el sexto piso de los tribunales marplatenses se mostró "conforme" con la sentencia.

Dos disparos

Los magistrados no hicieron lugar, en tanto, al pedido del defensor de Calvo, Pablo Carmona, quien había pedido su absolución por considerar que no pudo probarse la autoría del crimen.

Para el tribunal, quedó probado que Calvo asesinó con un arma calibre 38 a Zubillaga, con quien tenía una amistad desde niños y con quien trabajaba en una quinta en el barrio Parque Palermo, en la que fueron halladas 270 plantas de marihuana.

Según el fallo, al que tuvo acceso Télam, el acusado disparó al menos en dos oportunidades a Zubillaga, lo que le produjo "un shock hipovolémico que desencadenó un paro cardiorrespiratorio".

Después de dispararle, Calvó cargó el cuerpo en la parte trasera del Peugeot 206 que pertenecía a la víctima, y minutos después lo depositó envuelto en nylon "debajo de un montículo de bolsas de basura" a pocas cuadras, donde fue hallado dos días después, luego de que su familia denunciara la desaparición del joven.

El vehículo, en tanto, fue encontrado "totalmente desguazado e incinerado" en un descampado ubicado cerca de la ruta 88, en el suroeste marplatense.

Tras el crimen, se dispuso la detención de Calvo, que fue aprehendido cuatro días más tarde por personal de la Dirección Departamental de Investigación marplatense en una granja de rehabilitación en la ciudad de Bahía Blanca.

El imputado llegó al juicio detenido en la Unidad Penal 44 de Batán, y negó las acusaciones durante las audiencias: "A mí me están queriendo culpar de algo que no hice. Me mataron a mi mejor amigo, nos conocíamos desde chicos, como a toda su familia".

El fallo de los magistrados, en tanto, consideró que "la versión exculpatoria del acusado no fue solvente ni convincente" y que su declaración en el juicio resultó "inconsistente e inverosímil", por lo que dispuso su condena y que fuera trasladado nuevamente a la unidad penitenciaria.

Fuente: Télam