Una compleja situación económica y financiera atraviesan desde hace años más de 120 diarios y periódicos de todo el país, quienes recalcaron una vez más la necesidad de acciones y políticas que les ayuden a superar este trance.

Se trata de los medios gráficos nucleados en Diarios y Periódicos Regionales Argentinos (DYPRA), para quienes la crisis provocada por las restricciones a que obliga la pandemia del coronavirus supone otro duro golpe.

Desde Córdoba, una docena de medios de la denominada segunda escala remarcan que la actual contingencia llega luego de varios años de caída de sus ingresos por publicidad, producto de la contracción del consumo, y de traspiés propinados por las políticas que impulsó el gobierno de Mauricio Macri en materia de medios.

Reunidos en Dypcor, entidad integrante de Dypra, la que integra El Periódico, una docena de proyectos comunicativos del interior provincial recordó que hay pedidos que aún no han sido atendidos por las autoridades.

Jorge Conalbi Anzorena, presidente de Dypcor y director del diario Sumario de Alta Gracia, explicó que desde hace dos años bregan por la sanción de una ley de sostenimiento del pluralismo informativo y la diversidad comunicacional. “Esa ley tiene que constituir un fondo con aportes provenientes de un canon que se les cobre a las empresas de contenidos globales, que se benefician con la producción permanente de los medios regionales del país. Ese canon permitiría el sostenimiento del pluralismo informativo y la diversidad comunicacional", señaló.

Para Conalbi es imposible pensar en una democracia sin diversidad de opiniones: “Creemos que es imposible pensar en el pluralismo informativo y diversidad comunicacional sin tener en cuenta a los medios regionales”, afirmó.

Más voces

Víctor Valente, director de la Revista La Unión Regional con sede en las Sierras Chicas, aseguró que el gobierno de Mauricio Macri “potenció el poder de los medios hegemónicos y ninguneó la ley de medios”.

Agregó que ante la falta de consumo, el cierre de negocios, la caída de la actividad económica, “nuestros anunciantes fueron desapareciendo paulatinamente”.

Tras advertir que muchos proyectos se encuentran al borde del cierre, Valente señaló un camino a seguir: declarar sujetos de protección a los medios: “No pedimos pautas publicitarias. Pedimos puesta en valor de nuestros diarios, periódicos y revistas, a fin de que también los estados municipales tengan el gesto de declararnos sujetos o bienes de protección cultural. Algo que ya sucedió, por ejemplo, en la ciudad de Saldán con la revista La Unión. Eso serviría de apoyo ante estas emergencias”, explicó.

Por su parte, Miguel Gramajo, director del diario El Despertador de Jesús María, añadió que los medios regionales también deben enfrentar una reconversión tecnológica acelerada, congruente con los cambios de hábitos de lectura de los usuarios y la opción por redes sociales a la hora de publicitar.

"Para adaptarnos al mercado necesitamos reconvertirnos tecnológicamente. Pedimos apoyo al Estado porque nos sentimos en franca desigualdad de condiciones frente a los grandes medios. No sólo llevan la delantera, sino que también tienen una solvencia económica que nosotros no tenemos, porque administramos recursos escasos", sentenció.