"Despues de casi cuatro años, de una crisis monetaria prolongada en el tiempo y del mayor programa de asistencia del FMI en la historia, el enfoque de la administración de Mauricio Macri para controlar la volatilidad del mercado y mantener contentos a los electores está fracasando, de cara a las importantísimas elecciones presidenciales de octubre", arranca el artículo del diario Financial Times de este jueves que lleva como título "Argentina, al borde del colapso".

El medio especializado toma nota de que un posible default de la deuda soberana de nuestro país (que es lo que mide el riesgo país) está en su nivel más alto desde que Macri asumió la presidencia, luego de dejar a la Argentina como el segundo deudor soberano más riesgoso en el planeta, solamente detrás de Venezuela.

La columna de opinión, que lleva la firma de la periodista especializada Colby Smith, detalla que "los fuertes movimientos se producen cuando las perspectivas de reelección de Macri parecen debilitarse decididamente, y los funcionarios del gobierno se esfuerzan por contener tanto la inflación récord como una moneda cada vez más volátil, con poco éxito".

La nota tampoco es optimista en lo referente a la implementación del programa de precios de productos esenciales con los que el Gobierno nacional pretende aliviar los efectos de una inflación que se sitúa (medida de marzo de 2018 a marzo de 2019) en el 55%.

"Esto es lo que Jan Dehn, de Ashmore Group, dice sobre la reciente decisión de Macri de congelar los precios de hasta 60 productos: 'Consecuente con su larga tradición de mala gestión de la economía, el Gobierno argentino abandonó la semana pasada su intento más reciente de ortodoxia macroeconómica en favor del tipo de medidas políticas heterodoxas, que han sido las culpables de la larga trayectoria de los malos resultados económicos de Argentina'", cita Financial Times.

¿Es todo malo para el Financial Times? 

"No todas las políticas del gobierno han fracasado –rescata–. Con una postura monetaria ultraestricta, el Banco Central ha diseñado un reequilibrio de la balanza comercial del país, cuestión clave para los inversores no hace mucho tiempo. En marzo, la Argentina registró un notable superávit comercial de 1.180 millones de dólares, impulsado por una disminución interanual del 33,7% de las importaciones. El año pasado, el país tenía un enorme déficit comercial de 554 millones de dólares".

La cuestión es que sólo un superávit comercial no gana las elecciones, termina señalando, con apunte de un concepto que Alejandro Catterberg de Poliarquia Consultores ofreció en un evento organizado por la banca JP Morgan en Washington este mes: "El problema es que muchos de esos fundamentos son chino básico para la gente común en la calle. No entienden lo que significa un déficit fiscal, no saben lo que es una cuenta corriente. Las variables económicas que influyen en sus decisiones electorales son la volatilidad del peso, la inflación, la pobreza y el consumo. En estas cuatro categorías, la gente siente que las cosas están peores que cuando Macri empezó".

Fuente: La Voz del Interior