Un video grabado desde el interior de un vehículo logró captar cómo vecinos de la ciudad de Esquel, en Chubut, atacaron a golpes a un hombre condenado por secuestro que llegaba a su domicilio luego de haber sido beneficiado en las últimas con prisión domiciliaria.

Las imágenes fueron difundidas por el medio local Red43 y muestran cómo el hombre es abordado por al menos siete personas que lo corren y le aplican goles de puño y patadas, hasta que interviene la Policía para frenar la agresión.

Según publica Red43, el agredido es Pablo César Sommaruga quien cumplía una condena de 18 años por integrar una banda de secuestradores y en las últimas horas fue beneficiado con la domiciliaria.

Pese a la intervención policial en el lugar, los vecinos volvieron a agredir a Sommaruga a golpes y piedrazos, amenazando a los periodistas que lograron registrar el episodio. 

 
Finalmente, Sommaruga se subió al auto de una radio local y pidió que lo llevaron nuevamente a la cárcel.

Quién es

Según publica TN, Pablo César Sommaruga cumplía una condena en la Unidad 14 de Esquel y fue beneficiado con el régimen domiciliario el pasado 27 de abril, luego de una medida dictada por el juez José Pérez Arias, quien está a cargo del Juzgado Nacional de Ejecución Penal N° 1. 

Sommaruga fue uno de los integrantes de “Banda de los patovicas” que en 2002 se hizo conocida  por el secuestro extorsivo al que sometieron a Ariel Strajman.

Los Sommaruga secuestraron al hijo de un joyero y pidieron dinero a cambio de su liberación. Cobraron unos 1000 dólares, 400 pesos y algunas joyas. Pero querían más. Durante el cautiverio quemaron a Strajman con cigarrillos, lo maltrataron por su condición de judío según quedó expresado en el juicio y para negociar un rescate más alto le cortaron un dedo meñique y se lo enviaron a su padre. 

 
El juez Claudio Bonadio y el entonces fiscal Oscar Amirante, lograron determinar que la banda estaba integrada por los hermanos Adrián y Pablo Sommaruga, el padre de ambos, la mujer del padre y un medio hermano de los “patovicas”, entre otros.

Los Sommaruga vivían en Villa Urquiza,  y todos fueron condenados por el secuestro. Algunos a penas bajas y otros a penas altas de acuerdo al grado de participación en el delito. Adrían Sommaruga fue condenado a 22 años de prisión. Y Pablo Sommaruga a 16 años y medio pero se le unificó la condena con otro delito y por eso debía completar 18 años.

En el 2015, Pablo  se escapó de la Unidad 19 del Servicio Penitenciario Federal en Ezeiza, donde gozaba de salidas transitorias tras estar 12 años preso.

 
Tras cuatro días, volvió a ser detenido en un procedimiento donde le secuestraron un arma y droga.

Desde entonces, cumplía condena en la Unidad 14 de Esquel, hasta que en las últimas horas le otorgaron la prisión domiciliaria.

Fuente: La Voz del Interior