El primer ministro británico, Boris Johnson, fue dado de alta este domingo y agradeció su labor al personal sanitario que lo atiende en el hospital donde estuvo internado por coronavirus y dijo que les "debe su vida". Al mismo tiempo, aumenta en el Reino Unido la polémica por escasez de equipamiento protector en los hospitales.

En su primer mensaje difundido desde que el jueves salió de la unidad de cuidados intensivos (UCI) del hospital londinense de St. Thomas, donde ingresó el 5 de abril, el premier británico dijo al personal que atiende su salud: "No puedo agradecérselo suficiente. Les debo la vida", según citan las agencias EFE y Europa Press.

Según el último parte médico, Johnson, de 55 años, se recupera bien del virus tras pasar tres noches en la UCI, y ya fue dado de alta.

Su novia, Carrie Symonds, de 32, espera el primer hijo de ambos y también se contagió el virus Covid-19.

De todos modos, tanto la ministra del Interior, Priti Patel, como antes el propio padre del primer ministro advirtieron de que éste "necesitará tiempo" para descansar antes de poder volver a tomar las riendas del Ejecutivo.

En tanto el jefe del gobierno británico convalece, aumentan las quejas del personal médico y de enfermería, entre otros sectores como el de atención social, por la falta de equipamiento de protección adecuado para atender a los pacientes.

Los sectores de la salud expresaron su indignación después de que esta semana el ministro de Sanidad, Matt Hancock, afirmara que ese equipo debe usarse "con cuidado" porque es un "recurso valioso", tras lo cual Patel tuvo que disculparse ayer con la gente que "siente" que ha habido deficiencias en la gestión.