El intendente de Villa María en uso de licencia y actual secretario de Obras Públicas de la Nación, Martín Gill, fue imputado junto con otras 14 personas por el presunto delito de incumplimiento de la cuarentena.

El funcionario había acudido a una fiesta familiar por el cumpleaños de su madre donde la Justicia investiga si  acudieron más de 10 personas y tras ello se le detectó Covid-19. Todos los contactos estrechos de Gill también habían dado negativo en los estudios. 

La Fiscalía de Segundo Turno, a cargo de Juliana Companys, notificó a cada uno de los imputados por vía telefónica debido a las restricciones sanitarias por la pandemia.

La imputación invoca el artículo 205 del Código Penal: "Será reprimido con prisión de seis meses a dos años, el que violare las medidas adoptadas por las autoridades competentes".

Mientras tanto, desde el entorno del dirigente, expresaron al sitio Cba24n.com.ar que se abrió una investigación penal y en la misma la Fiscalía debe imputarlo a los fines de que pueda ejercer el derecho de defensa. "No se puede defender una persona en un proceso penal, si primero no es imputado", afirmó una fuente cercana a Gill.

En ese marco recordaron cómo fue el proceder del funcionario cuando se enteró que padecía la enfermedad. En ese marco, detallaron que el 6 de julio, cuando tomo conocimiento del resultado positivo, comunicó inmediatamente a la autoridad sanitaria municipal para que se resguardara a sus contactos estrechos. Estos, a la fecha y como se indicó, tienen resultado negativo en sus hisopados. 

Explicaron que el 15 de julio, cuando se corroboró que existía una investigación judicial, sin que nadie lo notificara, se puso a disposición de la Justicia, mediante una presentación espontánea, aclararon.

Ahora, ya formalmente imputado, el funcionario comenzará a proponer ante los estrados judiciales los elementos que permitirán demostrar que no ha cometido ningún delito, ni él ni sus familiares, dijeron desde su entorno.

Fuente: CBA24n.