Un número no precisado de personas que participaron de una fiesta clandestina en un domicilio terminaron aislados ya que la propietaria había dado positivo de Covid-19. Sin embargo, y conociendo su situación, la mujer y otro grupo de jóvenes, organizaron una segunda reunión prohibida, a la que denominaron jocosamente “la fiesta de los aislados”, cuya repercusión terminó con denuncia policial.

El intendente de Altos de Chipión, Neris Garraza, expresó en diálogo con AM 1530, Radio Centro de Morteros que “no me cabe en la cabeza lo que han hecho”.

Según Garraza, “como municipio, lamentablemente no pudimos actuar en el momento, pero le dimos participación a la Policía. En la ‘fiesta de los aislados’ no pudimos precisar cuántas personas hubo, pero la inconciencia que tiene esa gente es increíble”.

Según se conoció, las personas que participaron de “la fiesta de los aislados” se encontraban dentro de los días en que debían cumplir por aislamiento y lo rompieron. “Se volvieron a juntar con todo el riesgo que ello conlleva, si alguno de ellos da como positivo se los deberá volver a aislar y no solo a ellos, sino también a sus familias", advirtieron desde el municipio.

En este sentido, Garraza advirtió: “Estamos pasando por uno de los peores momentos y esto se puede agravar”, al tiempo que remarcó que han tenido problemas con las derivaciones por contagios de coronavirus.

“Como en toda la región la situación es compleja a la hora de derivar pacientes Covid positivos. Hemos tenido casos que tuvimos que tenerlos de cuatro a cinco horas esperando acá, en lo que denominamos una cama fría, con todo lo que hacía falta”, aseguró.