Una grave denuncia trascendió más allá de los escritorios de la Fiscalía de Asuntos Complejos de San Francisco. Llegó a la prensa y desató una fuerte preocupación que en poco tiempo se frenó.

El viernes se conoció que la familia de una adolescente de 13 años denunció que tres hombres que circulaban a bordo de una camioneta la secuestraron el jueves por la mañana y la mantuvieron cautiva durante algunas horas. También que habían abusado de ella.

La menor –siempre según la denuncia- había sido abordada a la salida de una clase de gimnasia escolar dictada en el Centro de Educación Física Municipal, ubicado frente al Parque Cincuentenario. Luego, la dejaron en la misma zona.

La noticia corrió como reguero de pólvora y generó una infinidad de comentarios en las redes sociales de los medios de comunicación (Ver: Podía pasar). Sin embargo, en las primeras horas de la tarde del viernes la menor desmintió los hechos.

Una mentira para zafar

El fiscal Bernardo Alberione, a cargo de Asuntos Complejos, confirmó que la adolescente inventó que fue secuestrada y abusada sexualmente. La joven fue sometida a una cámara gesell y reveló que eran falsos los hechos denunciados.

La adolescente manifestó que atravesaba problemas familiares y que por ese motivo inventó esa historia. Según pudo conocer El Periódico, durante esas horas donde faltó a clases, habría estado junto a un amigo en la casa de una compañera y decidió mentir luego para no ser reprendida por sus padres.

Una mentira con nombres y apellidos

Fuentes tribunalicias consultadas por este medio informaron que la menor le puso nombres reales a su relato, algunos de personas con antecedentes policiales o familiares de estos. Además detalló de buena manera la camioneta que la había levantado de la calle y hasta informó un número de patente, lo que llevó a los investigadores a chequear varios datos en 24 horas.

Podía pasar

Antes de la desmentida, la noticia generó la ira e impotencia de muchos ciudadanos. Las redes sociales mostraron el enojo de los comentaristas, vecinos de la ciudad, quienes en muchos casos indicaron que esto podía llegar a ocurrir de acuerdo a que muchos chicos concurren al Centro de Educación Física diariamente, el que está ubicado en el sector de barrio Parque, al que catalogaban de “peligroso”.

Afortunadamente el relato no fue real. Según dijo Alberione a El Periódico, la investigación tuvo una rápida resolución de acuerdo a la trascendencia que se había generado por este caso en poco tiempo: "Recibimos la denuncia ayer (por el jueves) y hoy (por el viernes) la tenemos resuelta; hay que imaginar la situación: levantan una joven en cercanías al predio deportivo y la dejan allí a las pocas horas tras abusar de ella. Son muchos los padres que tienen hijos que concurren a este predio", señaló.