El hombre que presuntamente golpeó salvajemente el último sábado a Norma Panero de Bongiovanni, la madre de Mauro Bongiovanni, el homicida de María Eugenia "Marita" Lanzetti, quedó imputado por lesiones graves este lunes por la mañana.

Por otra parte, recién el martes será indagado por el fiscal Alberione, quien investiga la causa. En principio, el hecho no tendría que ver con el femicidio de Lanzetti, pero la fiscalía deberá determinarlo. El abogado defensor de Reyes, quien trabaja como remisero, es Sergio Corón Montiel.

El hecho

La mujer solicitó en la tarde del sábado un remise a una agencia de nuestra ciudad, que era conducido por un chofer de confianza de la familia. Una vez en el domicilio de la septuagenaria, la mujer le indicó el viaje hasta la casa de un familiar. En el trayecto, el remisero le solicitó que le permitiera detenerse un momento en su vivienda de calle Lavalle y Catamarca antes de llegar a destino, a lo que la pasajera habría accedido.

Una vez en el lugar, la señora ingresó a la casa junto al remisero -se investiga si lo hizo amenazada, engañada o por propia voluntad- y ya en el interior, éste la habría golpeado hasta ocasionarle serias heridas en la cabeza producto del impacto contra el suelo.

Posteriormente, el presunto agresor trasladó a la víctima hasta el Sanatorio San Justo, y allí los médicos que los recibieron habrían alertado a la Policía. A la mujer le diagnosticaron traumatismo de cráneo, por lo que quedó internada y luego fue derivada al Sanatorio Argentino.

Versiones

Entre las versiones que manejan los investigadores hay una que fue tomando fuerza con el correr de las horas e indica que Reyes habría frenado en su casa y luego habría aparecido frente a la mujer para solicitarle que le tome fotografías. La mujer habría tomado algunas imágenes, quizás bajo amenazas, pero luego se negó a volver a hacerlo, lo que provocó la ira en Reyes que la atacó brutalmente golpeando su cabeza contra el piso. 

Otra de las versiones indica que Reyes le habría pedido dinero a la mujer y esta se habría negado a dárselo, por eso el ataque. Y la última, es que el remisero habría querido abusar de ella.

Los investigadores secuestraron un teléfono celular desde donde se habrían tomado las fotografías y prendas femeninas.