A través de un discurso televisado, el presidente de Francia Emmanuel Macron anunció nuevas medidas para hacerle frente a la expansión de la variante Delta del Covid-19 en ese país, entre ellas la obligatoriedad de la vacunación para el personal médico y la extensión del pase sanitario a actividades cotidianas. 

 A raíz de la expansión de la variante Delta en Francia, Macron anunció que el personal médico y los ciudadanos que tengan contacto con personas a las que denominó como “frágiles” deberán vacunarse de manera obligatoria. Desde el 15 de septiembre se prevé que existan controles y sanciones para aquellas personas que incumplan con el mandato. 

Al respecto, también dijo que por el momento confiará en la autonomía de la ciudadanía en miras de recibir la dosis contra el coronavirus, pero que la posibilidad de una vacunación obligatoria para el resto sigue abierta. 

El repunte de los casos por la variante Delta preocupa al mandatario francés, por lo que afirmó que “si no actuamos ahora, los casos de contagios y la ocupación hospitalaria aumentará”.

Por eso, el objetivo de su gobierno es vacunar al 100% de la población. Macron afirmó que aún hay nueve millones de dosis disponibles que no han sido administradas y que otras más irán llegando al país. Refiriéndose a la vacunación dijo que es “una responsabilidad individual (...) pero también una cuestión de libertad”. Agregó que es la “única forma de volver a la vida normal”. 

 Según las cifras del Ministerio de Salud, en Francia 35,9 millones de personas han recibido una dosis de la vacuna y 27,8 millones ya tienen el esquema completo. El Ministerio también informó de 1.260 nuevos casos de Covid-19 en la última jornada.

Pase sanitario obligatorio

Además, el presidente galo anunció otras acciones para controlar la propagación del virus, entre ellas la ampliación del pase sanitario como requisito para acceder a establecimientos abiertos al público. El certificado muestra si una persona ya está vacunada o si se ha obtenido recientemente una prueba negativa de Covid-19.

La medida ya era vigente para entrar a discotecas, al igual que a eventos sociales y deportivos de más de 1.000 personas. Pero, a partir del 21 de julio, también se exigirá en establecimientos de cultura como cines y teatros con capacidad para más de cincuenta personas. Tendrán que presentarlo quienes tengan desde 12 años de edad, en adelante. 

En agosto, el pase se extenderá y también se pedirá en espacios como restaurantes, cafés, centros comerciales y establecimientos deportivos.  Además, se aplicará para autobuses y trenes de largo recorrido.

La determinación es una estrategia más para incitar a los franceses a vacunarse. El mandatario mismo afirmó que tomó la decisión de “imponer restricciones a las personas que aún no cuentan con vacunas, más que a toda la ciudadanía”. 

El mandato ya causó reacción en los franceses. Poco tiempo después de la alocución de Macron, el portal web de salud del país, Doctolib.fr, colapsó debido a la cantidad de personas que ingresaron para reservar una cita de vacunación.

Las pruebas PCR ya no serán gratuitas

Con el objetivo de impulsar la vacunación en vez de la toma de test PCR, Macron anunció que dichas pruebas ya no serán gratuitas. 

Desde el inicio de la pandemia, se podían solicitar las PCR sin ningún costo en diferentes partes del país, pero ahora los franceses deberán pagar por una, a menos que tengan una prescripción médica que se las ordene.  

Por otro lado, Macron anunció que decretará el estado de emergencia en la Reunión y Martinica por lo que volverá el toque de queda en ambos lugares. 

Si bien esta decisión tiene que pasar por el Consejo de Ministros, se espera que pueda contrarrestar la alta ocupación médica y el corto avance en la vacunación en estos territorios. 

Protestas

Según el Ministerio del Interior, miles de manifestantes se citaron en 137 protestas de varias ciudades para exigir "libertad", en alusión a la extensión del 'pass sanitario' y a la vacunación forzada de los trabajadores de la salud. Estos fueron algunos de los planes anunciados esta semana por el presidente Emmanuel Macron, que han sentado mal en un país en el que hasta ahora la no obligatoriedad era promesa de 'liberté'.

 "Liberté", "Macron dictateur". De norte a sur, las pancartas señalaron este 17 de julio al presidente del Elíseo y a los valores nacionales. Y es que de Marsella a Lille, y de Montpellier a París, cerca de 114.000 personas salieron a manifestarse en todo el país contra las medidas "anti Covid-19" anunciadas hace cinco días por el mandatario.

Entre estas está la vacunación obligatoria del personal de salud, además de la ampliación del 'pass sanitario', una especie de certificado "libre de Covid-19" exigido de cara a la reapertura de establecimientos. Sin él no se puede, por ejemplo, ingresar a lugares como restaurantes, centros comerciales o cines. 

Unas medidas que parte de la población ha interpretado como positivas para combatir un aumento de las infecciones –este sábado el país se mantuvo por encima de los 10.000 casos–, pero otra parte ha sentido como un veto a la libertad de elección de quienes no desean vacunarse.

Con información de EFE, AP y France 24.