Esta semana, el Cuerpo Activo de Bomberos Voluntarios tuvo un arduo trabajo. El martes, una dotación con 22 bomberos debió acudir a un incendio de rollos que tuvo lugar en avenida Caseros y la Autovía 19. Durante seis horas de trabajo, desde las 21 hasta las 3.30, los bomberos debieron lidiar con un viento de 25 kilómetros por hora con ráfagas que alcanzaron los 50 kilómetros por hora. Esta condición climática generó una cortina de humo gigante que dificultó la visión de los voluntarios, quienes no solo debían exterminar el fuego sino también evitar que éste se propague hacia los campos del norte.

Controlar el incendio y erradicarlo precisó del trabajo de 22 bomberos que estuvieron bajo el mando del Oficial Sub Inspector Bombero Voluntario Luciano Castellari y de cinco unidades. Además, se emplearon 120 mil litros de agua para lograr eliminar el foco de incendio. Los 340 rollos fueron quemados en su totalidad pero se logró salvar los dos silos aéreos, que gracias al esfuerzo y el trabajo del cuerpo de bomberos no sufrieron daños. Si bien la magnitud de este siniestro fue grande, no hubo personas heridas.

Un día, cinco siniestros

Al día siguiente debieron acudir a cinco siniestros, cuatro en nuestra ciudad y uno en Quebracho Herrado. Este último se dio al mediodía, donde una dotación con cuatro efectivos a cargo del Cabo Bombero Voluntario Gamaliel Galván debió extinguir un incendio de 20 hectáreas. Al llegar, comenzaron con 16 hectáreas de rastrojo de maíz. El fuego atravesó y quemó un camino con amplia forestación y alcanzó el campo vecino del que se incendiaron tres hectáreas de rastrojo de soja. La dotación encargada de esta zona debió trabajar cuatro horas para poder erradicar el fuego.

Pasado el mediodía, otra dotación con cinco hombres a cargo del Cabo 1º Bombero Voluntario Savid Diego Fernando debió acudir nuevamente a la zona de avenida Caseros y Autovía 19 para apagar un  incendio de pastizales. Los bomberos estuvieron trabajando durante dos horas.

Por la tarde, otras dos dotaciones debieron salir a siniestros de menor magnitud: uno de ellos en la ruta vieja, el cual contó con el trabajo de tres efectivos bajo el mando del Cabo 1º Bombero Voluntario Emanuel Trucco; y el otro en Rosario de Santa Fe al 800, donde trabajaron cuatro voluntarios a cargo del Cabo Bombero Voluntario Diego Gómez. En ambos casos, fue por quema de pastizales.

Por la noche, a las 21, una dotación de cinco hombres bajo el mando del Oficial Ayudante Bombero Voluntario Nicolás Allocco acudió a una vivienda de nuestra ciudad. Tanto la cocina, como el extractor y la alacena poseían rastros de fuego, aunque en ese momento ya se encontraba extinguido. El mismo comenzó debido a un accidente que se produjo cuando el aceite con el que cocinaban agarró fuego. Afortunadamente no hubo víctimas, solo daños materiales.