“Voy un rato, total vivo al lado”, dijo Inés Caffaro allá por los años 90 cuando aún era estudiante en la Alianza Francesa y necesitaban a alguien que fuera cada tanto a un espacio radial para difundir música francesa. Fue allí que le vieron capacidad y así, un poco de casualidad, comenzó una carrera de casi 30 años en medios de la ciudad, principalmente en Canal 4, aunque todavía reniega a la hora de definirse como periodista.

Retirada de la profesión desde el 2017, asegura que después de 22 años en la pantalla, una suma de pequeñas cosas la convencieron de que había cumplido un ciclo y que su decisión de retirarse de la actividad no fue precipitada sino que la tomó con tiempo. Hoy reparte su tiempo entre el aprendizaje de idiomas, algo que le apasiona, y su nuevo trabajo en la Tecnoteca San Francisco.

En la entrevista en Yo Digo, el programa que se emite por El Periódico TV y El Periódico Radio FM 97.1 (martes a las 19), contó que del periodismo lo que más le gustaba era estar en la calle, ir a ver lo que pasaba y hablar con gente; y no tanto conducir programas informativos en un estudio de TV.

- Estuviste muchos años como una de las caras visibles de Canal 4. ¿Cómo fue que llegaste al periodismo?

- No soy un ejemplo de que quería hacer esto y luché hasta que lo obtuve. Se dieron las cosas vaya a saber por qué. Yo estudiaba en la Alianza Francesa y ocurrió que había un espacio de la Embajada en la radio, en la AM, para difundir música francesa. Nadie se animaba, yo vivía al lado de la radio y dije bueno, voy un rato. Ahí conocí a un conductor, que me ofreció estar en la radio haciendo móviles y después me ofreció que lo acompañe a un programa en el canal. Y así fue que empecé con algo que pensé que era pasajero.

- Estamos hablando de más de 20 años atrás, ¿no?

- Sí, fue en el 95 que empecé en el canal, y antes en la radio. La radio no me encantó o no se me dio. A mí lo que me gusta mucho es estar con la gente, me gusta estar en el lugar, estar ahí en el reclamo, ir a ver. En el canal, que es donde más tiempo estuve, lo que más me gustaba era estar en la calle.

- ¿Y cómo fue que te llegó la propuesta del canal?

- Fue con Darío Pérez, a él le habían hecho la propuesta en el canal. Era un programa de 19 a 20, se llamaba Interesante, antes del informativo. Me ofreció ir con él y probar, después se fue y quedé sola con el programa. Había otra chica que después se fue a vivir a Buenos Aires, y así quedé en el canal.

- Estuviste muchos años conduciendo informativos pero también se te reconoce por tener mucha actividad en la calle.

- Sí, mucho móvil. Conducir un noticiero no era lo que más me atrapaba porque no interactuaba. En el programa de la tarde sí tenía entrevistados, entonces charlaba más con la gente. Al final eso es lo que más me gustaba del periodismo, hablar con la gente.

- Pero te sentías una periodista, no era algo que vos pensabas que estabas de paso hasta que te saliera otra cosa.

No, no. En el primer año dije bueno, acá estoy, pero no sabía si el programa iba a seguir o no. Y después las cosas se fueron dando, fui aprendiendo de la gente que sabía. Yo no estudié periodismo, fui aprendiendo en el andar, por ahí hacíamos algún curso.

- Y era muy diferente la práctica del periodismo a esos años en que empezaste a lo que es hoy o lo que fueron tus últimos años.

No había redes sociales, tenías que salir a buscar la información, llamar a los teléfonos fijos. Era mucha calle, era más de cuerpo que ahora, que a lo mejor estás más con la computadora o con el teléfono.

- Recuerdo que eras buena a la hora de hacer preguntas.

- Era como mi forma de ser, no era un trabajo, y sigo siéndolo con mis amigos o conocidos. Me gusta saber de la gente. Por ahí hago algunas preguntas indiscretas. Me gustaba provocar en algunas cosas, porque si no cómo hacés el ida y vuelta. A veces se te acaban las preguntas. En el programa de la tarde era más buena.

- ¿Y qué pasó que te fuiste del trabajo?

- No había una causa puntual y tampoco fue una decisión precipitada. Empecé a decir que me iba a ir, tomé la decisión en febrero en 2017, la comuniqué y a mitad de año me fui.

- ¿Ya no te sentías cómoda o qué pasaba?

No sé, una suma de pequeñas cositas. Y también había que darle paso a los jóvenes, no puede ser que alguien se eternice veintipico de años. Y mirá ahora cómo entró gente joven en el canal.

- O sea que habías cumplido un ciclo.

- Sí, capaz que sí.

- ¿Qué cosas valorás de tantos años trabajando de periodista y cuáles te sentís aliviada de no tener que hacer más?

- Lo que a veces me pesaba era dejar mis chicos, sobre todo al más grande, que yo estaba sola. En esa época si había un accidente a las tres de la mañana se iba, por más que sea en la ruta. No esperabas que alguien te mande la foto, había que ir, volver al canal y hacer un informe. ¿Y qué hacía con los chicos? Los cargaba en el remis. A lo mejor, ¿para qué haberles hecho pasar esas cosas? En esa época también se hacían los programas de Navidad y fin de año en vivo, entonces dejaba a mi abuela y mi hijo con los amigos para poder estar yo. Ahora se graba y ya está, es lo mismo.

- ¿Y qué cosas te dejó la actividad?

- Un montón de cosas, un montón de gente conocida o que no conozco que me habla, me para, me saluda. Es como un mimo. El conocimiento de la ciudad, me conocía todas las calles. Pisé todas las calles de San Francisco y Frontera. Y si no sabía llamaba al 101, a la Policía, para preguntar dónde quedaba tal calle. Me gusta conocer, me da bronca no saber de algo. Hice varios años un programa de salud con el doctor Bianchini y él siempre decía que el médico clínico sabe poco de mucho y el especialista sabe mucho de poco. Bueno, a mí me gusta saber un poco de mucho. Siempre le buscaba lo interesante a todo, entonces es difícil profundizar en algo. Nunca hice una investigación, tampoco tenía tiempo. No sé si sabría hacerlo, no tengo ese rigor. Como que picoteaba.

- A lo mejor no te sentías para eso pero sí para hacer otras tareas como salir a la calle e informar.

- Sí, me gustaba. Yo creo que cuando uno hace las cosas con entusiasmo, te podés equivocar pero tampoco te pueden salir tan mal, porque le ponés voluntad. Aparte cuando salís no estás sola, salís con un camarógrafo o camarógrafa, somos como un dúo. Hablamos en el auto, vamos pensando en lo que vamos a hacer después. O después hablamos de lo que dijo y el otro también te aporta, vas sumando, no te quedás con lo tuyo.

¿Ya fue para vos el tema de la pantalla o todavía tenés ganas de volver con algo especial ya no ligado al periodismo de lo urgente?

- Capaz que ya lo urgente fue, porque además acá es como que no se corre más la calle. No sé. A lo mejor algún día se da algo.

- ¿Desde que te retiraste qué pasaste a hacer?

- No hice muchas cosas. Empecé a colaborar en la Fundación Infantia, que a través de los medios estaba muy vinculada y ahora ya formo parte de la comisión. Me puse a estudiar alemán, porque tengo un poco de cada idioma. No tengo familia en Argentina, salvo la familia de mi marido. Pero de mi sangre, los únicos dos primos son nacidos en Candá y vivieron siempre allá, así que desde muy chica estudié inglés. Después estudié francés. Y mi mamá, mi abuela, mi tía son todos italianos, así que era como la lengua materna de la casa. Estudié también italiano en la Dante Alighieri. Me gusta saber y me da mucha bronca que me cueste tanto aprenderlos. Y desde el mes de abril estoy en la Tecnoteca, es mi nuevo trabajo, y me encanta porque tengo relación con la gente. Vienen los chicos, a veces hago locuciones, organizamos cursos. Está bueno.

- ¿Seguís atenta a la información local? ¿desde afuera ves las cosas de otra manera a cuando lo hacías vos?

- Sí, sigo los medios de acá más que nada y también los medios de Buenos Aires, me gustan los informativos. En mi casa se miraban más las noticias, a mi abuela no le gustaban las novelas así que cuando era chica se miraban noticieros. Noto que la gente no está tan preocupada por la noticia como nosotros. La gente se preocupa más por el accidente, por el policial, por una nota solidaria. Va más a la emoción, me parece, que a la política.

- ¿Te siguen parando en la calle para hacerte comentarios como si todavía estuvieras en la pantalla del canal?

- No, me dicen por qué no estoy o si voy a volver, pero nada más, esas cosas. Por ahí en algunos barrios me dicen que desde que no presento no van más, pero es como que ya no se estila ese tipo de notas. Ahora se manda una foto y mostrás cómo está la calle.