La ola de casos positivos de Covid-19 de los últimos 20 días en San Francisco pone en alerta nuevamente al sector gastronómico, que intenta acomodarse a la nueva normalidad.

Juan Molina, al frente de la seccional San Francisco de UTHGRA (Unión de Trabajadores del Turismo, Hoteleros y Gastronómicos de la República Argentina) indicó a El Periódico que el incremento de casos los preocupa e instaron a los propietarios de locales y clientes a tener responsabilidad social, con el objetivo de que la Municipalidad no recorte el horario de estos locales durante la noche, algo que sugirió el COE central para San Francisco días atrás.

“El avance del virus preocupa, San Francisco es una de las ciudades que mantiene abierto los locales gastronómicos después de las 20 y si nos hacen cerrar a esa hora para los gastronómicos que quedan en pie será muy duro afrontarlo”, dijo el gremialista.

El pasado 28 de septiembre, funcionarios de la Municipalidad de San informaron que “por el momento” no iban a tomar la recomendación del Centro de Operaciones de Emergencias (COE) central de restringir actividades. Claro que para ello pidieron un esfuerzo extra a los ciudadanos para que extremen los cuidados, considerando que no es momento de que retrotraer aún más la economía de uno de los sectores más golpeados en la pandemia.

Molina, entendiendo la situación, fue en el mismo sentido: “Desde el gremio instamos a la población a que tenga comportamiento social. Si va a un lugar gastronómico que está superpoblando –que no debería estarlo- que no entre. O irse sino se cumplen los protocolos, las medidas sanitarias. Pasa por nosotros cuidarnos porque la Municipalidad no puede poner un inspector en cada negocio para controlar. Lo mismo le pedimos a los mismos gastronómicos”, expresó Molina.

Para Molina se trata de “respetar el protocolo porque hasta que no venga la vacuna vamos a tener estos vaivenes. Si nos quitan la noche, que es cuando más afluencia de gente tenemos en los comedores y bares, la vamos a pasar mal”, insistió.

A su vez, reconoció una merma de clientes en los últimos 15 días en los locales de la ciudad, ante la suba de casos confirmados. Aunque agregó que se nota en personas más grandes y no en los jóvenes.

Preocupación por los hoteles

Por otro lado, Molina sostuvo que junto a los hoteleros de San Francisco esperan ser recibidos por el intendente Ignacio García Aresca: “Queremos plantear la necesidad de abrir los hoteles. Primero porque hace desde marzo que están cerrados. Pero también porque hay pasajeros que están llamando para alojarse, que son trabajadores esenciales que al no tener un hotel donde parar terminan en pensiones, casas de familia o siendo alojados en alguna habitación que se alquila. Esto está pasando y la mayoría de esa gente, consideramos, está desprotegida. Los hoteles tienen un protocolo para poder abrir y es seguro”, advirtió.