Los agentes turísticos argentinos ya estaban conformes con el abultado calendario de feriados puente que rige este año, y ahora sumaron argumentos para ampliar ese buen momento con los que regirán en 2014. Esta situación, según las estimaciones del sector, generarán ingresos extras en los principales destinos turísticos del país por $2.000 millones al año.

El último fin de semana largo de octubre pasado había movido unos 830 millones de pesos.

El martes el Gobierno dispuso la creación de nuevos días no laborables “con fines turísticos” que regirán para 2014, 2015 y 2016, año en el que ya habrá finalizado el actual mandato de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner.

"Desde hace ya un tiempo quedó claro que el hecho de que haya una previsibilidad representa un claro beneficio para nosotros. Para quienes viven del turismo es una buena forma de preparar diferentes propuestas, mientras que los turistas cuentan de este modo con la posibilidad de diagramar sus viajes con mayor comodidad”", sostuvo Fabricio Di Giambatista, presidente de la Asociación Argentina de Agencias de Viajes y Turismo (Aaavyt), según consigna el diario El Cronista en su edición de este miércoles.

Según el directivo, los sectores más beneficiados son los comercios del interior del país, al igual que las economías regionales. “Para ambos el cambio que se produce a nivel financiero es muy fuerte”, resaltó.

Roberto Brunello, presidente de la Federación Empresaria Hotelera Gastronómica de la República Argentina, también dio su visto bueno ante la ampliación de los “feriados largos”.

Así y todo, desde la Cámara Argentina de Turismo (CAT) señalaron tras el último fin de semana largo que el impacto económico de la actividad turística sobre las economías regionales del país para este año e acerca a los 6.000 millones de pesos, sólo en fines de semana largos y sin contar las vacaciones de verano ni el receso invernal, lo que llevaría la cifra de 2014 a guarismos mayores

La sanción de la ley de Corrimiento de Feriados y Escalonamiento Vacacional es un instrumento legal que hace previsible el calendario. Fue uno de los reclamos del sector privado al público, y acompañamos el proceso porque consideramos que el ordenamiento de los feriados y la previsibilidad impulsan la hotelería, la gastronomía y el turismo”, dijo, en línea con las palabras de Di Giambatista.

Los directivos marcaron también que con la llegada de estos dos nuevos “puentes”, casi ya no quedan meses del año sin un fin de semana largo.

El Gobierno –mediante el decreto 1768/2013 publicado en el Boletín Oficial– dispuso que el año próximo los días no laborables especiales serán el viernes 2 de mayo, para crear un feriado puente” por el Día del Trabajador, y el viernes 26 de diciembre, día posterior a la Navidad.

En 2015 los días no laborables serán lunes y martes, que serán el 23 y el 24 de marzo (por el Día Nacional de la Memoria por la Verdad y por la Justicia, del 24 de marzo), y el 7 y el 8 de diciembre (Día de la Inmaculada Concepción de María).

En 2016, mientras tanto, los días “especiales” serán el viernes 8 de julio, (previo al feriado por el Día de la Independencia, y el viernes 9 de diciembre (posterior al Día de la Inmaculada Concepción de María).

La disposición 1768/2013 argumentó la “necesidad” de establecer “feriados con fines turísticos” para los próximos tres años, debido a la vigencia del decreto 1584/2010, que creó los “feriados puente.