Miles de visitantes esperan este viernes en Capilla del Monte para “celebrar” el 21 de diciembre, día en el cual culmina el calendario maya y sobre el que se han elucubrado presagios de toda índole, la mayoría sin sustento. Esta ciudad serrana es la capital nacional no designada de los cultos esotéricos y las creencias en vida extraterrestre. La idea de los capillenses es recibir de 15 mil a 20 mil personas. Si ocurre, agradecerán la oportunidad a los mayas.

Dos eventos hay programados: uno público, en el balneario municipal, y otro privado, en un complejo para el que habrá que pagar entrada.

El intendente Gustavo Sez confirmó ayer que, ante la posibilidad de malas interpretaciones, el municipio decidió cerrar el acceso al Cerro Uritorco, en acuerdo con los propietarios de las tierras. El aviso llegó después de que circularan versiones en las redes sociales sobre la posibilidad de que ingresaran integrantes de grupos que creen en el advenimiento del fin del mundo para esta fecha. Eso encendió alguna luz de alerta.

El acceso al cerro permanecerá cerrado entre las 0 del jueves hasta las 6 del sábado.

El intendente está entre los que espera que pase algo bueno ese día: “Será un gran encuentro místico por el fin de la cuenta larga de la profecía maya. Pasamos de un período de oscuridad donde la mala onda termina a un período de luz donde el amor y la armonía van a prevalecer”, dijo a este diario. “Nos enorgullece que la gente venga a recibir esta nueva armonía en Capilla del Monte. Esperamos 15 mil personas, pero no podemos dar una cifra exacta”.

Marcelo Albalá es uno de los organizadores del evento en el balneario municipal. Cuenta que lo central será el concierto de cuencos que se realizará en forma simultánea en 35 países del globo y asegura que esta localidad de Punilla fue la elegida como sede argentina.

Sebastián Rodríguez, del Hostel Los Tres Gómez, indicó que la ocupación ronda el 50 por ciento y que esperan llegar al ciento por ciento el viernes y sábado.

“Tenemos reservas de gente de distintos puntos del país y ahora hay alojada gente de Canadá, Francia y España”, dijo.