La empresa que realiza la recolección de residuos domiciliarios en San Francisco, Ashira, pidió en el mes de marzo último redeterminar el precio que cobra por el servicio que presta. Según explicó el concejal del Partido Justicialista, Marcelo Moreno, “factores externos –entre ellos la inflación- hicieron que la rentabilidad de Ashira se degrade y que en el corto plazo comience una tendencia deficitaria en la prestación del servicio”.

Por este motivo, Moreno analizó que es “conveniente” llegar a un acuerdo y determinar un nuevo precio para que la empresa siga siendo eficiente. Entre los argumentos para su aprobación, desde el oficialismo ponderaron que Ashira se desempeñó en forma correcta desde su contratación.

En desacuerdo

Los bloques de Mejor San Francisco (MSF) y la UCR votaron en contra esta iniciativa fundamentando que se estaba “renegociando” el contrato.

Damián Bernarte, concejal de MSF dijo que el oficialismo defiende los intereses de la empresa sobre los del Estado municipal: “El municipio asume en este caso el riesgo empresario de Ashira; pero son ellos los que se presentaron a licitación y deben asumir estos riesgos”, consideró, agregando que la empresa no cumple en su totalidad con el contrato firmado en 2011.

Por su parte, Luis Canalis, de la UCR, manifestó que “si a Ashira no le gustan estas condiciones del contrato debería rescindirlo y la municipalidad llamar nuevamente a licitación”.

“Somos gobierno”

El concejal oficialista Raúl Fassi acusó a la oposición de buscarle “la quinta pata al gato”. A su vez, el edil agregó que “cuando sean gobierno sabrán lo que es ser oficialismo porque van a tener que tomar decisiones”.