Pese a innumerables proyectos y promesas, la ruta nacional 158 sigue plagada de baches, grietas, banquinas en erosión, pozos y falta de señales. Y en estos días de lluvia e inundaciones que afectan la región, su peligrosidad aumenta ante los "piletones" de agua que se forman en ella, por lo que los automovilistas deben extremar las medidas de precaución. 

Si bien su estado es bastante malo en casi todo su trayecto, principalmente hasta Villa María, la peor parte se concentra entre las localidades de Saturnino Laspiur y Quebracho Herrado, donde las fallas en la calzada son prácticamente la norma, en lugar de la excepción. Es un pozo detrás del otro, a cual más profundo y extenso, lo que la convierte en una ruta de altísimo riesgo.

Algunos consejos

-No circular a alta velocidad: la lluvia reduce la visibilidad, sumándose también las luces de los otros vehículos y el propio parabrisas que se encuentra mojado.

-Después de llover, trate de tomar todas las precauciones posibles, ya que el agua, el aceite y el combustible generan en el asfalto una película que hace difícil el agarre de los neumáticos con el suelo.

-Utilice el freno mucho antes de lo normal y suavemente. Esto causará que tenga más tiempo para reaccionar ante eventualidades que pueda llegar a tener el vehículo que va delante suyo. Asimismo, tome las curvas con precaución y utilizando la giñada.

-Evite los grandes charcos que se producen por la lluvia, tal vez alguno de ellos sea un pozo demasiado profundo y termine lamentando roturas en la suspensión. También el evitar estos charcos evita a que el motor se moje más de lo debido.

-Otra de las recomendaciones es tener las luces de los faros encendidas. Teniendo en cuenta que la visibilidad se reduce, producto de la lluvia, esto ayudará a los conductores de vienen de frente a percibirlo a usted. Si su vehículo está equipado con luces antiniebla, utilíceselos, ya que estos ayudan a visualizar mejor el camino.

-Tener cuidado del cruce de los peatones. La lluvia hace disminuir la amplitud de percepción del oído, la cual ayuda a que las personas que van caminando no tengan noción de las distancias. También los peatones muchas veces al llover corren despavoridos huyendo en busca de refugio. Este es otro tema para prestar más atención a la hora de manejar bajo la lluvia.

-Si la lluvia es torrencial y hace que se dificulte la visibilidad, pare y espere. Es preferible perder un poco de tiempo y evita así inconvenientes futuros.

-La lluvia hace que sus vidrios se empañen interiormente. Limpie el parabrisas, la luneta y los vidrios laterales. Utilice si lo desea el aire acondicionado.

-En caso de que su vehículo derrape, no trate de frenar de golpe ni tampoco gire hacia el lado contrario. Deje de acelerar suavemente y deje que su vehículo recupere la tracción.

-A los motociclistas y ciclistas se les aconseja el uso del casco protector y tener luces encendidas para ser visibilizados.