Un día que suponía alegría y entretenimiento en un parque de diversiones de Jose C. Paz, se lleno de conmoción y desesperación por la precariedad edilicia del lugar cuando en la noche del domingo, una silla del tradicional jugo de la vuelta al mundo se desprendió en pleno funcionamiento.

El parque de diversiones del barrio René Favaloro, fue foco de un episodio que pudo ser sido una tragedia en el momento que un hombre de 31 años y su hijo de 10 cayeron al vacío desde unos cinco metros de altura sufriendo heridas producto del incidente. Además, otra nena de 6 años sufrió lesiones al caerle la silla mientras esperaba para subir a la atracción.

Se vivieron momentos de alta tensión, entre los gritos y la urgencia de asistir a los heridos en ese parque de la avenida Saavedra Lamas al 7500, cerca del límite entre José C. Paz y Moreno; según trascendió, habría abierto sus puertas hace sólo dos semanas.

El hombre herido tras caer de la silla sufrió doble fractura expuesta en una de sus piernas y también se golpeó la cabeza, por lo que quedó inconsciente en el suelo por algunos minutos.

Su hijo de 10 años no tuvo golpes de gravedad. Además, otras dos nenas de 8 y 9 años de edad sufrieron lesiones cuando les cayó la silla (una pesada estructura de hierro) mientras esperaban para subir a la atracción, una de ellas también con una fractura expuesta en una de sus piernas.

Todos los heridos fueron trasladados primero a la Unidad de Pronta Atención 15 del barrio René Favaloro y luego derivados de urgencia al Hospital Domingo Mercante de José C. Paz.

El predio itinerante llamado Roller Park, traslada sus juegos por distintos barrios por períodos específicos de tiempo, este de había instalado hacía dos semanas sobre ese espacio de la avenida Saavedra Lamas al 7500 y continuó funcionando tras el incidente hasta que llegó la Policía al lugar.

Según reportaron testigos, las pesadas estructuras metálicas de los juegos están algo despintadas y evidenciaban cierta falta de mantenimiento, al menos estético.

Luego del incidente, se supo que algunos desconfiaban de ciertos ruidos que hacían los juegos, aunque confiaban en que si el parque estaba operativo era porque había superado los controles pertinentes.

Lo cierto es que el episodio terminó de confirmar esos miedos o inquietudes por un presunto abandono: los heridos no cayeron por alguna falla de la traba de seguridad de las sillas, sino por la caída de una de estas.

La investigación quedó a cargo de la UFI N°4 de San Martín, que dispuso la clausura del predio y la imputación de su dueño, Felipe Fernández (68) por el delito de lesiones culposas.

Ahora la Justicia deberá establecer que sucedió con la estructura metálica para que se desprenda la silla que, por su peso y por la presencia de menores en la fila para subir al juego, bien podría haber provocado una tragedia.

Otro aspecto que se tomará en cuenta es el de la responsabilidad de la Municipalidad de José C. Paz, que emite las habilitaciones para este tipo de lugares y debe certificar que funcione con todas las normas de seguridad correspondientes.

Fuente: Ámbito